Secciones
Servicios
Destacamos
Aunque muchas veces la ciudad se olvide de lo que tiene más allá del río, los vecinos del barrio de La Vega volvieron a llevar el Perdón a toda la ciudad.
Martes de Perdón en León. La cofradía ferroviaria volvió a recordar el calvario de la forma que mejor lo sabe hacer: de la mano de sus héroes del barrio que cruzaron la capital para cruzar el Bernesga de madrugada.
Noticia Relacionada
Rubén Fariñas
Partiendo desde el Asilo de los Ancianos Desamparados, con túnica y capillo marrones, fajín blanco y cruz franciscana al cuello, centenares de papones del Santo Cristo del Perdón celebraron la indulgencia plena de una reclusa del Centro de Inserción Social que recibía la libertad condicional gracias a la intercesión de la cofradía.
Una mujer -M.J.M.P., leonesa, normalizada y que gran parte de su familia desconocía su condena ha abandonado el tercer grado y se ha sumado al desfile procesional en una plaza de Regla que se entregó una vez más la penitencial de San Francisco de la Vega.
Ante el Locus Apellationis, junto al pórtico de la Santa Iglesia Catedral, autoridades civiles, militares y religiosas recibieron la llegada del cortejo. La cruz de guía anunciaba perdón y los faroles ferroviarios, blancos para los más pequeños y rojo para los mayores, marcaba el camino de libertad que esta vez no pudo llegar en forma de indulto.
Noticias Relacionadas
María Fernández
María Fernández
25 años lleva el Santo Cristo del Perdón dando segundas oportunidades, y han sido los propios reclusos los que han querido agradecerlo sumándose a la procesión. Hasta 14 presos han pujado tres de los pasos que pone en liza la barriada, incluyendo por primera vez a tres mujeres que lo hicieron en el brazo de la Madre de la Paz.
La Condena de Cristo era la primera de las tallas en asomarse a la Pulchra Leonina. En ese momento, ya no quedaba sitio para asistir al acto central. La Banda de la Virgen de la Celada, de La Robla, acompañó el paso.
El sonido de la esquila alimentaba la esperanza. La túnica estaba reposaba perfumada con néctar de libertad. Tras ello, el imponente Cristo del Perdón pedía clemencia por la hermana que estaba a punto de obtener su condicional. Junto a él, su banda, que regresaba a la escena musical tras años complicados.
El futuro en la puja lo marcaban los jóvenes braceros del Cristo de la Esperanza. La talla anónima que reposa en el altar de La Vega acompañaba el paso de los mayores. La Banda de Nuestra Señora de la Soledad puso acordes a la pequeña talla.
Y la Madre de la Paz era la última en sumarse al Acto del Perdón. Una vez que la virgen, reposando sobre casi un centenar de braceras, hacía acto de entrada, todo estaba listo para la redención. La Agrupación del Gran Poder cerraba el cortejo junto a unas mujeres enlutadas.
Tras el sonido del Orfeón Leonés, que puso emoción al momento, el hermano abad hacía lectura de la petición de libertad y el alcalde respondía de forma afirmativa a dicha solicitud. En ese momento, una mujer abandonaba su carga y accedía a su absolución.
Tras una tensa espera, la puerta del Seminario Mayor, a la que acudieron el subdelegado, y de forma extraordinaria el alcade, se abría y el anhelo de perdón cobraba forma bajo la túnica y el capillo. El Santo Cristo del Perdón volvía a lograr su gracia, aunque el Gobierno considerara que no debía ser plena -rechazó la solicitud de indulto cursada por la cofradía-.
Noticia Relacionada
Leonoticias
El obispo recordó que el perdón «cura, regenera y da vida» y que la cofradía ayuda a mantener la esperanza con paciencia. «Del perdón no podemos prescindir, todos lo hemos pedido y recibido».
La penada se sumó a la procesión y camino con calma y con seguridad hacia la libertad. Una libertad que atravesaría por primera vez un Ordoño peatonal, volvía a cruzar el río y se encerraba junto a los papones de La Vega en una masiva recepción a las puertas de la iglesia.
Publicidad
Sara I. Belled, Clara Privé y Lourdes Pérez
Clara Alba, Cristina Cándido y Leticia Aróstegui
Javier Martínez y Leticia Aróstegui
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.