Salt Room, la opción perfecta de haloterapia para los más pequeños

Salt Room te lo pone fácil para la vuelta al cole. El centro de haloterapia leonés ofrece tratamientos para combatir los problemas respiratorios, dermatológicos y de estrés de los más pequeños. Combatir las complicaciones derivadas de enfermedades como la bronquitis es más sencillo gracias a los métodos aplicados por el centro. Gracias a su terapia natural clínicamente probada, los niños pueden mejorar su respiración hasta un 83% y reducir el uso de medicamentos.

El centro, ubicado en la calle Demetrio Monteserín número 8, cuenta con las mejores instalaciones y la tecnología más avanzada para aplicar haloterapia. Las sesiones, que deben durar en torno a 40 minutos, se realizan en salas saturadas por micropartículas de sal de origen mineral. Numerosos estudios han demostrado como su aplicación proporciona importantes beneficios para los pequeños que sufren bronquitis, permitiéndoles liberar la tos y disminuyendo la frecuencia de los ataques de respiración. La acción antinflamatoria de la sal produce una desinflamación de las vías respiratorias haciendo desaparecer la dificultad para respirar. La respiración suele mejorar al tercer día y los síntomas en su mayoría desaparecen al cabo de una semana.

En León, Salt Rom cuenta con varias cuevas de sal, halospa y espacios para que los niños jueguen y disfruten durante la terapia. El suelo, cubierto en su totalidad por sal, permite a los pequeños interactuar con ella como si de arena se tratase. Además, la presencia de televisión y juguetes en sala hará más fácil la aplicación de la terapia mientras los niños disfrutan de un rato agradable. En todo momento, los peques deberán estar acompañados por sus padres. De esta forma, ellos también podrán experimentar de primera mano los increíbles beneficios de la haloterapia.

En tan solo un par de sesiones, los clientes podrán experimentar una mejora evidente en su calidad de vida. Siempre se ha puesto de manifiesto los efectos de acudir al mar cuando sufrimos problemas de mocos y alergias. Sin necesidad de acercarse a la costa, los niños podrán experimentar en el centro las sensaciones y efectos positivos equivalentes a pasar tres días en la playa.

La eficacia de la haloterapia va más allá de la respiración. La piel de los niños se beneficia también de las partículas de sal que se depositan en su rostro y cuerpo. El PH de la piel se equilibra y se favorece los procesos de regeneración natural, lo que ayuda en el tratamiento de enfermedades como la dermatitis o la psoriasis.

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