Las voluntarias que colaboraron en el mural de homenaje a Nevenka posan junto a la artista Mercedes deBellar

En un comunicado, aluden a que Nevenka «pagó un alto precio por ello, debido a la incomprensión de una sociedad que no supo estar a la altura de las circunstancias y brindarle el apoyo que una ciudadanía concienciada debería haberle dado».

«Una vez más Nevenka da la cara en un documental, de forma altruista, para poder ayudar no solo a otras mujeres, sino para contribuir a aumentar la sensibilidad social y ciudadana ante este tipo de delitos. No podíamos imaginar dadas las circunstancias de la pandemia un mejor 8 de marzo que éste», concluyen.