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Álvaro Romero
Jueves, 29 de diciembre 2016, 12:14
Tromso es una de las ciudades más grandes del norte de Noruega y capital de la provincia de Troms. Es la puerta del Círculo Polar Ártico y la segunda mayor urbe de la región de Laponia. El municipio de Tromso cuenta con diferentes distritos externos ... a los límites de la ciudad que contienen una parte de territorio continental y otra parte formada por numerosas islas.
Un lugar que aúna cultura y naturaleza. Perfecto para los amantes de las actividades al aire libre, puesto que con tan solo salir del núcleo urbano el entorno se transforma en naturaleza salvaje, óptima para la práctica de deportes como senderismo, esquí de fondo o paseos con raquetas. Otra posibilidad es realizar actividades típicas de la zona y que quedan en la retina y la memoria del visitante, ejemplo de ellos son los paseos en moto de nieve o en trineo tirado por huskies.
En pleno territorio ártico, la ciudad noruega se encuentra repleta de nieve y paisajes helados. Si visitas Tromso debes adentrarte en alta mar e ir en busca de ballenas, los avistamientos de estos animales son frecuentes en las gélidas aguas que bañan las costas del país escandinavo. Gigantes marinos en su hábitat natural que parecen bailar al ritmo de las olas.
Aunque, no queda ahí la cosa, las actividades son la mayor demanda de los turistas pero, si decides realizar este magnífico viaje no puedes irte sin disfrutar de la alegría de las calles de Tromso y la calidez de sus gentes. Pasea entre casitas de madera, rincones llenos de animación y visita la conocida como Catedral del Ártico. Prueba su excelente cerveza artesana fabricada en la zona y piérdete entre sus interminables extensiones nevadas.
Estos mares son los más ricos del mundo y exportan pescado fresco a toda Europa, allí el pescado es un manjar, pieza clave en los menús árticos, que trabajan a la perfección en cualquiera de sus restaurantes. Las bajas temperaturas del agua hacen que productos como pescados y mariscos crezcan lentamente haciendo que sus carnes sean mucho más tiernas y frescas. Más que alimentos son parte de la cultura y tradición local.
La belleza de las auroras
Si buscas disfrutar de las auroras boreales este es tu sitio, las luces del norte aparecen entre los meses de septiembre y marzo, siendo uno de los regalos más bellos que ofrece la naturaleza. Para divisarlas deben acompañar las condiciones meteorológicas y la cantidad de actividad solar. Es importante que el cielo se encuentre despejado y el sol esté activo, por todo ello son difíciles de predecir. Son un fenómeno indescriptible, lleno de luces y colores que tiñen el cielo y eliminan la oscuridad.
El sol de medianoche
Del 20 de mayo al 20 de junio, cada año, tiene lugar el conocido como sol de medianoche. Mes en el que el sol nunca se pone y parece rebotar en el horizonte para volver a subir, unos días mágicos que atraen a turistas de todo el mundo y que son amenizados con actividades de todo tipo las 24 horas del día. Se trata de uno de los fenómenos naturales más insólitos que existen, naturaleza hecha espectáculo para inmortalizar en forma de fotografías y presumir de ello toda la vida.
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