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Este verano, León te espera, vuelve a tus orígenes, vuelve a tu historia, conoce los secretos mejor guardados de nuestra tierra; patrimonio, naturaleza y gastronomía. León es una provincia para recorrer y sentir, en la que podrás vivir experiencias inolvidables, disfrutando de su gastronomía, alejándote en un medio natural sin igual, reencontrándote con los tuyos y contribuyendo con tus experiencias a generar riqueza. Así todos juntos ayudaremos a que León siga hacia adelante, superando esta situación, apoyando al sector y a nuestras gentes.
Hoy, gracias a Turisleon, nos vamos de museos, la montaña nos espera, en esta ocasión no para ofrecernos su paisajes sino para mostramos quien ha habitado estas zonas. Desde la acciones emprendidas por el hombre hasta la fauna y flora vamos a descubrir en este viaje. La mochila es ligera aunque el peso histórico se hace notar.
Comenzamos haciendo un homenaje a la fauna salvaje para ello nos desplazamos a un museo ubicado muy cerca Valdehuesa, municipio Boñar. El Museo de la Fauna Salvaje está enclavado en un brazo del gran pantano del Río Porma rodeado de robledales y hayedos que fijan sus raices en grandes montañas calizas. Por muchas veces que se visite esta exposición siempre sorprende, más de 8.000 especies llegadas de todos los continentes esperan nuestra visita.
Con la ayuda de un guía recorremos la veintena de salas que componen la colección de más de 450 mamíferos grandes de todos los continentes, 300 pequeños mamíferos, 100 primates, 50 reptiles, 4.000 especies diferentes de insectos y más de 500 aves.
El 'culpable' de la existencia de esta exposición es Eduardo Romero que hace casi veinte años decidió crear un espacio donde exponer las piezas que él cazaba de manera legal. Con el tiempo se le han sumado multitud de donaciones de diferentes centros generando uno de los lugares más visitado de la provincia.
Animales llenos de vida gracias al increíble disecado hace volar la imaginación. Paseamos por la sabana africana, nos bañamos en el mar Rojo, el frio acecha al pasar por Alaska pero rápidamente entramos en calor en el paraíso tropical de Sudamérica. Los murales que ambientan la sala consiguen que transportarse en cuestión de segundos por el mundo sea factible.
Nos llama la atención la sala de anatomía científica dotada de más de cincuenta esqueletos de diferentes animales. Descubrimos pequeños detalles que guardan los huesos de los más de cincuenta esqueletos que hay expuestos. Jabalí, corzo, rebeco se completan con animales vertebrados de otras zonas como chimpancé, varano y hasta una pitón con mas de 1.300 piezas óseas.
Museo de la Fauna Salvaje
Pero no todo iba a ser fantasear, la realidad llega a cuando accedemos al parque zoológico. Una gran extensión de terreno acoge a animales en semilibertad. Ciervos, bisontes europeos, jabalíes o lobos ibéricos conviven en este enclave.
A todo ello, hay que añadir una envidiable exposición de esculturas de bronce que recrean especies ibéricas y asiáticas.
Una amplia zona ajardinada con mesas nos permite tomarnos un refrigerio divisando el pantano del Porma y los Picos de Europa antes de emprender ruta por estos terrenos.
Sintiéndonos auténticos exploradores nos vamos del Museo de la Fauna Salvaje con dirección a Sabero . La historia reciente y el que fuera uno de los motores económicos de esta provincia nos espera. Hacemos parada en el Museo de la Siderurgia y la Minería.
Como antesala de lo que luego sucedió en el resto de León, con el cierre de las minas en este paraje nace este proyecto que honra la memoria de todos los mineros leoneses investigando, difundiendo y recordando el patrimonio siderúrgico y minero.
Museo de la Siderurgia y la Minería
Nos adentramos en la sede de este museo, la antigua Ferrería de San Blas, pionera por ser la primera en España en emplear altos hornos alimentados con carbón mineral así como por tener grandes maquinarias que revolucionaron la siderurgia en Europa. Este edificio, junto con los restos del alto horno, fue declarado Bien de Interés Cultural (BIC) en 1991.
El olor nos traslada a épocas pasadas. La fábrica, construida en piedra y ladrillo, con una gran nave central que deja entrar la luz recoge multitud de aspectos de la vida e historia de este sector.
Desde los romanos o visigodos que ya estuvieron por estas zonas en busca de mineral hasta un pasado que todavía corre por la sangre de esta zona marcando el carácter de esta provincia descubrimos en este museo.
Un maqueta que representa de forma detallada la cuenca nos explica de forma interactiva los procesos vividos en esta zona desde el siglo XIX. El comienzo, el auge, el declive, la reconversión explicado de manera amena e ilustrativa.
Maquinas antiguas, recreaciones, herramientas, fotografías y hasta un recorrido por la evolución de las lamparas sirve para conocer a fondo el papel de esta industria. Nos ponemos en la piel de una minero para conocer como se picaba, transportaba y en que condiciones lo hacían. La evolución de estas tareas a lo largo del tiempo nos impresiona.
El aspecto sociológico juega un papel crucial en este museo que hace especial hincapié en lo que supone para la zona la explotación de este mineral, surgiendo un modelo social, humano y arquitectónico que todavía pesa aunque ahora se ha tenido que adaptar al fin de la minería.
Además numerosas charlas, ciclos y conferencias tienen lugar a lo largo del todo el año complementando la oferta cultural de este enclave.
Después de aprender la lección nos vamos de ruta minera. Hacemos una pequeña caminata que comienza en el mismo museo, un cartel informativo nos informa de los detalle de 'la ruta de las minas'.
Se trata de una ruta circular de menos de 10 kilómetros que se puede realizar con niños dado que el nivel de dificultad es bajo.
Seguimos el sendero para conocer minas abandonadas y en desuso. El camino nos lleva a la ermita de San Blas, una obra del siglo XV, antes de hacer una parada en la 'Fuente la Mola', un rincón que llama al descanso por sus impresionantes vistas. Al poco nos encontramos con los primeros restos de una mina, concretamente la de 'La Plata'. Una pista forestal que dio cobijo a una mina de cielo abierto nos marca el camino antes de descubrir la mina Mariate. La Juanita o La Imponderable nos esperan más adelante para acercarnos a la cultura minera.
Un paraje rodeado de un precioso paisaje en el que se entremezcla la vegetación con el rio Esla hace que la visita sea obligada.
La montaña leonesa esconde una rica y variada gastronomía pero sin duda uno de los platos más característicos es el cocido de arvejos. Esta delicia culinaria se prepara entorno a este legumbre que es una variante del guisante. Como todo buen cocido hay que seguir un orden.
En primer lugar degustamos la sopa de arvejos vertiéndolo sobre pan de hogaza migado.
En segundo lugar se sirven los arvejos en una fuente, acompañados del nabicol, nabo característico de esta montaña.
Después llega el turno de la ración, sobre la mesa nos presentan una fuente de barro con morcillas, androja, chorizo, cecina, tocino, y oreja. La androja es un embutido a base de grasa de gocho, ajos, harina y pimentón, metido en tripa y cocido como las morcillas.
Para concluir esta 'comilona' a modo digestivo probamos una manzanas asadas.
Y siguiendo el recorrido que en su día hacía el carbón y muchos mineros, de Sabero nos vamos a Cistierna para conocer el Museo del Ferroviario
Ubicado en el antiguo economato del Ferrocarril de La Robla-Bilbao representa el mejor homenaje al tren y a sus gentes. En una de sus salas guarda los instrumentos necesario para la construcción de las antiguas vías hasta la recreación de las oficinas del jefe de estación. Cambiamos de sala para visionar una proyección que resume los más de 100 años de vida del Ferrocarril Hullero.
Artesanía e industria conviven gracias a la conservación de maquinaria e instrumentos que recuerdan la vida de los trabajadores ferroviarios.
Multitud de fotos nos muestran el trabajo cotidiano de los ferroviarios, además este museo conserva mucha documentación original de la época. Una maquina que se encargaba de imprimir billetes, una caja fuerte o una exposición de ollas ferroviarias completan la galería en la que uniformes y gorras hacen que parezca que nos hemos cambiado de época.
Museo del Ferroviario
Nos vamos de este lugar para llegar a nuestra última parada, Riaño. Un enclave marcado por su polémico pantano que ahora permite realizar una ruta en barco, única forma de divisar en su máximo apogeo la fauna salvaje compuesta por cabras, lobos, rebecos, águilas o buitres transitando por paisajes de caliza, hayedo o robledal.
La historia de esta zona descansa en el museo Etnográfico Montaña de Riaño. Tres plantas donde contemplar más de 900 piezas de distintas épocas que permite explorar la cultura y tradición en forma de fiestas populares y religiosas, trajes tradicionales o aperos a la vez que antiguos oficios o la arquitectura típica de la zona.
La esencia histórica y cultural de la Montaña de Riaño se recoge en esta exposición. En la sala Negra, se hace memoria alos pueblos sumergidos por el pantano con la proyección del documental 'Mi Valle', de la productora Waves Films.
En la sala de los Reyes Leoneses también puede ver documentales sobre los hitos históricos del Reino de León.
La sala de la Mitología Leonesa, la Escuela y los numerosos muñecos que complementan el museo, sorprenden en cada rincón.
Antes de regresar a casa, paseamos por la joven localidad de Riaño para empaparnos de cultura y tradición. Una construcción que forma parte del paisaje de esta zona detiene nuestro camino, se trata de un hórreo. Con un tejado a dos aguas, planta rectangular y cubierta de teja servía guardar y conservar los alimentos alejados de la humedad. La con la visita de la Iglesia parroquial de Santa Águeda, antigua de San Martín de la localidad de Pedrosa del Rey damos por finalizado esta ruta. Este edificio religioso fue trasladada piedra a piedra antes de la llegada del pantano. Dejando atrás la torre que data del siglo XVI regresamos a casa.
La montaña leonesa guarda un patrimonio de incalculable valor, sus gentes que han tallado con su esfuerzo y sacrificio la idiosincrasia de esta zona. El pasado de este enclave se ve representado en el presente algo que no desaparece gracias a la memoria de la población que se encuentra guardada en los museos que hoy hemos visitado.
Consorcio de Turismo de León www.turisleon.com
Ayuntamiento de Cistierna www.cistierna.es
Ayuntamiento de Riaño www.aytoriano.es
Museo de la Siderurgia y MIneria de CyL www.museosiderurgiamineriacyl.es
Museo de la Fauna Salvaje www.museodelafaunasalvaje.com
Asociación de Turismo Rural de León www.aletur.es
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