El ramal de Villadangos avanza con el objetivo de entrar en funcionamiento a inicios de 2024

El polígono industrial espera que la ejecución de trabajos siga al mismo ritmo que lo hicieron las administraciones con la dotación presupuestaria.

Hasta el momento, no se han detectado retrasos y todo sigue su curso para que a principios de 2024 el ramal esté en marcha. Esto permitirá al área industrial de Villadangos dotarse de conexión directa con la línea de ferrocarril.

Los trabajos, hasta otoño, pasan por el rellenado con zahorras para completar la vía en el valle. El tramo más delicado y con más dificultad técnica tendrá como hito el puente elevado sobre la autopista y la carretera nacional.

Este ramal ferroviario servirá como mecanismo de exportación para dos de las empresas más importantes del polígono: Mercadona o Coated Solutions. A ello habrá que sumar el punto estratégico en el que se convertirá Villadangos para el Puerto de Gijón. La previsión es que la sociedad portuaria lo utilice como puerto seco, es decir, como zona de descarga y transporte por la península de sus mercancías.

Las empresas asentadas en el Polígono Industrial de Villadangos del Páramo dispondrán de esta estructura para la salida directa de sus productos, algo que actualmente se hace a través del traslado al apeadero de la localidad.

En el horizonte también aparece la ampliación del polígono, ya aprobada y financiada por la Junta de Castilla y León, y que se encuentra en los trámites administrativos correspondientes tras el acuerdo con la junta vecinal para la cesión del suelo. La segunda fase abarca un área de 186 hectáreas que permitirá acoger nuevas empresas e industrias.

Con esta derivación se conectará la línea de ferrocarril León - A Coruña con el Polígono Industrial de Villadangos del Páramo, salvando, mediante sendos pasos elevados, la N-120 y la AP-71, garantizando así la intermodalidad ferroviaria del polígono industrial.

La construcción de este ramal reducirá la dependencia de la industria existente y de las que puedan implantarse en el futuro del transporte por carretera, en línea con los objetivos de la política común europea de transporte, minorando el tráfico de vehículos pesados por la AP-71 y la CN-120 con el consiguiente beneficio ambiental asociado al uso del transporte ferroviario, más eficiente energéticamente y menos contaminante. También supondrá una mejora de la seguridad vial en la AP-71 y la CN-120.