La Junta traslada a la junta vecinal de Villadangos la nulidad de su votación y confirma las exhumaciones

De este modo los cuerpos de los 71 fusilados del franquismo en esa localidad, y que fueron trasladados al camposanto por los propios vecinos de la localidad desde un monte próximo, podrán ser exhumados.

El pasado viernes los vecinos votaron su respaldo al plan de exhumación de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH). El resultado, 22 votos en contra y 12 a favor, además de dos abstenciones.

Algunos vecinos temen que las exhumaciones dañen otras tumbas, y su voto se debe a ese recelo, otros símplemente no quieren remover el pasado. Pero «las leyes no se votan», ya ha recordado la Junta de Castilla y León.

«Los familiares tienen todo el derecho a enterrar dignamente a los suyos es una cuestión de humanidad elemental. Nuestra intención es que esto se haga llegando a un acuerdo tras escuchar a todos. Tenemos la obligación legal y el convencimiento moral de colaborar en la apertura de fosas de la Guerra Civil. Lo hemos hecho ya, desde esta Administración y desde la anterior y de hecho estamos invirtiendo en la actualización del mapa de fosas. Los testigos son ya muy mayores, los hijos de las víctimas tienen cerca de 90 años, y esto es urgente», ha asegurado Francisco Igea al diario El País.

Este mismo razonamiento es el que Igea trasladará este mismo lunes al alcalde de la localidad, presidente de la junta vecinal y convecinos. La exhumación, por lo tanto, se realizará.

La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) ya había advertido desde hace semanas los problemas para concretar la extracción de los cuerpos y la recuperación de la memoria de los represaliados.

«Es la primera ocasión en la que vivimos una situación de este tipo», advirtió uno de los miembros de la asociación. «Tenemos todos los permisos», remató.

Igea pretende con su presencia 'ablandar' la oposición vecinal pero sin renunciar a un principio básico: la ley es la ley.