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Rose Byrne es Sheila, en 'Physical'.
Crítica de la segunda temporada de Physical en Apple TV: Sheila toma las riendas de su vida en 'Physical'

Crítica de la segunda temporada de 'Physical': Sheila toma las riendas de su vida

Segunda temporada ·

La historia de la instructora de fitness, que levanta un emporio vendiendo cintas VHS con sus rutinas de ejercicio, explora nuevos caminos en una segunda temporada que la exhibe ya empoderada

Iker Cortés

Madrid

Martes, 14 de junio 2022, 08:02

Poco tiene que ver la Sheila a la que conocimos en la primera temporada de 'Physical', con la que nos deslumbra en el arranque de esta nueva tanda de episodios, que Apple TV+ comenzó a emitir la pasada semana. Y eso que aún arrastra ... parte de la depresión, la ansiedad y las obsesiones -la comida y la delgadez- que configuraron en la anterior el personaje al que con tanta maestría da vida Rose Byrne. Un personaje que lograba caer bien, a pesar de resultar claramente antipático -consigo y con los demás- y de estar mirándose siempre el ombligo. Y es que lo que Sheila tenía que aguantar en casa era descorazonador. ¡Ojo, que van 'spoilers'! Además de desvivirse por el cuidado de la vivienda y por su hija Maya, se ocupaba de su marido Danny (Rory Scovel), un profesor universitario, bocazas y con un ego descomunal, que a las primeras de cambio era expulsado de la facultad donde impartía clases. Con la manida idea de que una crisis puede ser una oportunidad, Danny volvía a volcarse de lleno en una carrera política que nunca ha dado sus frutos. Y Sheila, pese a estar cansada de su paternalismo y de su egolatría, volvía a apoyarle por enésima vez. Lógico que atiborrarse a comida -alquilaba la habitación de un motel para ello- fuera una de las escapatorias de esta ama de casa en la San Diego de los ochenta.

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