Inmortales

Lógicamente, ha habido otros acontecimientos mundiales de gran trascendencia, deshielos, inundaciones, huracanes, terremotos, divorcios de famosos. Algún meteorito de cierto tamaño estuvo a punto de colapsar climatológicamente toda la vida del planeta.

Pero sobrevivieron.

Por ese afán de la sociedad de simplificarlo todo, todos lo conocen por sus abreviaturas: PM. Los niños se preguntan unos a otros si se saben todos los datos de PM y la forma en la que condicionan cada minuto de nuestra vida de cada uno de nosotros. No hay oposición que se precie en la que no entren varias preguntas al respecto.

Mucho se había especulado con la inmortalidad, con que la vejez se podría controlar, impedir que se acortaran los telómeros hasta llegar a edades impensables, pero nadie fue capaz de imaginar que los PM sobrevivieran generaciones y generaciones. Cuentan las crónicas de los historiadores que cuando aparecieron fue una época políticamente convulsa y que muchas de las personas que estaban presentes quedaron aterradas.

Con el paso de las décadas las diferentes generaciones se fueron acostumbrando y habituándose, se hicieron inmunosocialmente resistentes. Y aprendieron realmente el concepto de inmortalidad.

Las previsiones menos optimistas apuntan a que los PM se mantendrán durante otros 80 años, como mínimo. Nadie fue capaz de prever que los Presupuestos de Montoro (PM) aprobados en 2018 iban a sobrevivir casi 200 años. Montoro..., fiel seguidor de Andy Warhol cuando dijo que «La idea no es vivir para siempre, la idea es crear algo que sí lo haga».

PM

¡Y lo que te rondaré, morena!