Identidad capilar

Lo cierto es que las mujeres mayores de cuarenta y cinco años se preocupan por el cambio climático y por el pelo porque se preocupan por todo y por todos: por el adolescente que llega tarde y por el abuelo al que hay que acompañar al médico, por presentar a tiempo el informe y por dejar la comida preparada para el día siguiente, por hacerle el disfraz de pastora a la pequeña y por encontrar un vestido ideal para la cena de empresa. Las mujeres mayores de cuarenta y cinco años viven entre dos mundos, o entre tres. Será por eso por lo que, de vez en cuando, alguna confunde los términos: dice Carmen Calvo que la derecha «no tienen apoyos electorales en ninguno de los territorios de identidad histórica» porque le cuesta mucho hablar de diversidad territorial. Vaya. Otra que me despista con su mensaje capilar: toda la vida pensando que mi tierra tenía identidad histórica, y ahora ya no sé ni de dónde vengo ni de dónde soy. Y eso que Carmen Calvo va siempre muy bien peinada.