Elecciones autonómicas, ahora sí

Pues, como decía, súbitamente se han convocado por parte del actual gobierno autonómico unas elecciones que no tocaban. La oportunidad de esta convocatoria electoral en los tiempos de pandemia que desgraciadamente aún vivimos, con los problemas sanitarios de gran magnitud que se acrecientan con la escasez de profesionales de ese gremio, tanto médicos como enfermeros, no nos puede llevar más que a la conclusión de la inoportunidad de este momento para las elecciones.

El motivo latente de tal convocatoria, por tanto, parece claro que no es otro que afianzar por parte del Partido Popular su mandato en la Comunidad, mandato que viene ostentando ininterrumpidamente desde hace más de 30 años, y que en los últimos tiempos veía peligrar por su coalición con los «mercenarios» del partido Ciudadanos. Es necesario analizar lo que se ha hecho por León, su provincia y por la Región Leonesa en su conjunto por parte de este partido que lleva tantos y tantos años gobernando nuestros destinos, y ante cualquier análisis más o menos pormenorizado solo se puede llegar a la conclusión que lo que se ha hecho es nada de nada.

Podemos cuestionarnos qué sucede con el Partido Socialista, que se perfila como alternativa salvadora de los desaguisados continuos del Partido Popular en la actual Comunidad Autónoma. Pues la alternativa no deja de ser más de los mismo, y prueba clara de ello es lo que a nivel del Gobierno Central se ha hecho estos últimos años por León (valgan los ejemplos de FEVE, teatro Emperador, segunda fase del Parador de San Marcos, Polígono Industrial y Logístico de Torneros, Ciudad del Mayor, inversión en el Corredor Atlántico, etc.). Esto solo ya nos lleva a no esperar nada bueno para León si la Comunidad Autónoma pasa a estar gobernada por el PSOE.

Además, hay que tener muy en cuenta que ambos partidos, PP y PSOE, se han manifestado desde siempre en contra de que la Región Leonesa se constituya en Comunidad Autónoma, lo que quiere decir que, además de mostrarse en contra de lo querido por la mayoría de la población de nuestra Región, nos hace pensar que les parece bien la situación actual de León, Zamora y Salamanca y que, por tanto, con ellos en el gobierno todo seguirá igual de mal.

Con este triste panorama es el momento de pelear por lo nuestro y discernir quién puede conseguir mejoras importantes para la provincia leonesa y la Región Leonesa en su conjunto. Entra en juego aquí la Unión del Pueblo Leonés, el partido político que, con mejor o peor suerte desde la creación e imposición de la Comunidad Autónoma de Castilla y León, ha intentado pelear y buscar soluciones favorables para nuestra tierra. UPL propugna la creación de una Comunidad Autónoma formada por las provincias de la Región Leonesa, pero buscando con ello el beneficio de todos.

Se intenta conseguir además una mejora económica que nos lleve a una más que necesaria reindustrialización, lo que sin duda dará lugar a una parada de la actual y creciente despoblación. Otro tema fundamental que se pretende desde UPL se refiere a la sanidad rural y a la atención primaria en su conjunto, de manera que hay que conseguir mantener los Consultorios de las zonas rurales (el PP ahora también dice que hay que mantenerlos pero lo mismo dijo en la campaña electoral de las últimas elecciones y luego hizo precisamente lo contrario) y hay que lograr también un aumento de contratación de personal sanitario del que, vistos los tiempos que vivimos, no podemos prescindir.

Desde luego, el pueblo es soberano a la hora de decidir quiénes gobiernan los destinos de la generalidad de la población, pero creo que cualquiera que analice todas estas cuestiones podrá llegar a la conclusión de que sólo habrá beneficio para la Región Leonesa cuando aumenten, y cuanto más mejor, los representantes verdaderos de esta Región que hoy por hoy no son otros que los candidatos de Unión del Pueblo Leonés. Si esto no se consigue y sigue prevaleciendo el voto por inercia a los partidos de siempre solo cabe afirmar «que Dios nos coja confesados». Veremos…