Vox inicia el curso político en el Congreso cargando contra el 'sí es sí'

Los de Santiago Abascal solicitan al Gobierno conocer cuántos delincuentes han sido excarcelados o han visto reducidas sus condenas por la citada ley y si tienen previsto asumir la responsabilidad de este acto y además adoptar medidas para que los beneficiados no vuelvan a delinquir –el Supremo rebajaba también este lunes las penas de prisión impuestas a dos hermanos que emborracharon y violaron a una menor en Madrid–.

Lo hacen, además, coincidiendo de lleno con la polémica en torno a Luis Rubiales y su beso a Jenni Hermoso, un caso al que el propio Abascal aludió días atrás para asegurar que el presidente del Gobierno, al igual que exigían el resto de partidos al dirigente deportivo, debería «haber dimitido» a raíz de las consecuencias del 'solo sí es sí' –las excarcelaciones ascienden hasta 117 y las reducciones de pena superan las 1.155–. Vox es la única formación que no ha pedido aún de forma expresa la renuncia de Rubiales.

Se trata de la primera acción parlamentaria que lleva a cabo Vox en la actual legislatura después de que la Mesa del Congreso diese el visto bueno este lunes a la formación de los distintos grupos. De hecho, otra de las peticiones formuladas por los de Abascal en este inicio de curso político fue la de exigir esta mañana mediante un escrito a la Mesa de la Cámara baja suspender la formación de los grupos parlamentarios de Junts y ERC. Desde la sede de Bambú 12 sostienen que el préstamo de escaños del PSOE y Sumar a los independentistas para que ambas fuerzas pudieran cumplir los requisitos supone un «fraude de ley» y no se ajusta a las condiciones que recoge el Reglamento del Congreso –reclaman a su vez la suspensión de las retribuciones económicas y devolución de los recursos materiales de los diputados independentistas–.

Más allá de la incertidumbre acerca de quién formará Gobierno e incluso si este llegará a constituirse, la estrategia de Vox no parece que vaya a sufrir alteración alguna –al menos en el discurso duro que le ha caracterizado hasta ahora–. Eso sí, partirá con desventaja tras dejarse el pasado 23-J casi 20 escaños respecto a 2019 –33 asientos cosecharon en las pasadas generales–.

Los 52 escaños con los que contaba Vox permitieron a los de Abascal en la anterior legislatura recurrir en el Constitucional algunas de las principales leyes impulsadas por Sánchez. Esa representación también hizo posible que presentaran hasta dos mociones de censura contra Sánchez: la primera fue en 2020 con Abascal como candidato, mientras que en la segunda, que se produjo el pasado mes de marzo, el economista y exdirigente del PCE Ramón Tamames fue la persona escogida para liderar la iniciativa parlamentaria.

Vox ya no podrá contar con ninguna de esas dos bazas, aunque quizá el cambio más sustancial al que se enfrenta su grupo parlamentario radica en la marcha del que hasta ahora ha sido portavoz, Iván Espinosa de los Monteros. Al ya exdirigente –uno de los fundadores del partido– le sustituirá Pepa Millán, uno de los rostros más jóvenes en Bambú 12 (28 años) y que hasta ahora ha sido senadora.