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JAVIER PÉREZ PARRA
Martes, 19 de enero 2021, 21:37
El consejero de Salud de la Región de Murcia, Manuel Villegas, y otros altos cargos de su departamento están ya vacunados frente a la covid, como también decenas de funcionarios de los edificios de oficinas tanto de la Consejería como del Servicio Murciano de Salud ( ... SMS). Esto choca con el protocolo del Ministerio de Sanidad, que limita la vacunación durante esta primera fase a personas «que trabajan en centros sanitarios».
Esta información, adelantada por La Verdad de Murcia , ha originado una crisis en el Gobierno de coalición de esta comunidad autónoma, formado por PP y Ciudadanos, con el apoyo externo de Vox. Tanto que, a Villegas, del PP, se le ha exigido de inmediato la dimisión por parte de la portavoz de sus socios liberales. «El protocolo de vacunación es muy claro en la Región de Murcia. A los Consejeros no nos corresponde vacunarnos todavía y es muy importante que seamos ejemplares. Este comportamiento no es admisible. El consejero de Salud debe asumir su responsabilidad y dejar el cargo», señaló la portavoz del Gobierno y dirigente de Ciudadanos Ana Martínez Vidal.
En la última actualización del protocolo, publicado el 18 de diciembre, se establece que será vacunado de forma prioritaria todo «el personal del ámbito sanitario que trabaja de cara al paciente» en las plantas covid, las UCI, los servicios de Urgencias, los centros de salud, el 061 y los servicios con pacientes de alto riesgo, como Oncología. También los sanitarios de los equipos de vacunación y «el personal sanitario de Salud Pública que trabaja en la gestión directa de la pandemia, en función del riesgo de exposición». En un segundo grupo, dentro de esta primera fase de vacunación, se enmarca a «otro personal sanitario y sociosanitario».
Este protocolo deja claro que se trata de personas que «trabajan en centros y establecimientos sanitarios y sociosanitarios», y advierte expresamente de que «en esta primera etapa, la vacunación se centrará solamente en el personal que de manera específica realiza actividades que exigen contacto estrecho con personas que puedan estar infectadas por SARS-CoV-2, es decir, en función del riesgo de exposición y transmisión». El resto de trabajadores deben esperar a la vacunación, en posteriores etapas, de «personal esencial de primera línea» u «otro personal esencial», entre quienes se podrían encuadrar policías o bomberos.
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El portavoz de la Consejería, Jaime Pérez, ya aseguró que no se sería demasiado estricto a la hora de priorizar a los trabajadores de primera línea, porque había «disponibilidad» de dosis para todos. Lo cierto es que el consejero Villegas y otros altos cargos se han vacunado antes de que se complete el proceso en los hospitales, y antes de que se inicie la vacunación de otro grupo prioritario, el de cerca de 4.000 grandes dependientes en los centros de día.
Villegas admite que recibió la primera dosis de la vacuna «la semana pasada», y recalca que es médico de la sanidad pública. También se ha administrado la vacuna a otros altos cargos del departamento. Salud señala que «solo se han vacunado miembros del equipo directivo de la Consejería formado por sanitarios», y lo justifica en que «el equipo directivo forma parte esencial dentro de la gestión de la pandemia». Es cierto que el protocolo avala la inmunización de los epidemiólogos, rastreadores y de quienes gestionan la Salud Pública, pero no se incluye a responsables de otros departamentos.
No obstante, fuentes del SMS aseguran que la decisión se consultó con el Ministerio, y explican que se consideró que todos los servicios son en estos momentos esenciales. «No podemos permitirnos un brote en el equipo de contratación, por ejemplo», señalan estas fuentes.
Pero la decisión de comenzar la vacunación en los edificios de oficinas del SMS y la Consejería antes de culminar la inmunización en hospitales y centros de salud genera controversia. Los pinchazos en el edificio Habitamia, sede del SMS, comenzaron a mediados de se la semana pasada, y no se ha distinguido entre el personal que habitualmente se desplaza a hospitales del resto. En Habitamia trabajan casi 400 personas entre administrativos, auxiliares y personal de servicios jurídicos, de Recursos Humanos y un largo etcétera.
El sindicato UGT ya denunció que en algunos hospitales se había vacunado antes al personal de áreas administrativas que a sanitarios de plantas de hospitalización. Ahora, LA VERDAD ha podido confirmar que también altos cargos de la Consejería y funcionarios no asistenciales se inmunizaron antes que parte del personal sanitario.
Para Juan Crevillen, secretario de Acción SIndical de la Federación de Servicios Públicos de UGT, es «imperdonable» que la cúpula de la Consejería se haya vacunado antes que muchos sanitarios y «del personal de Ayuda a Domicilio, que trata con ancianos, muchos de ellos dependientes».
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