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El Gobierno marroquí tiene otra versión de los sucesos del viernes que acabaron con entre 23 y 37 inmigrantes sudaneses muertos junto a la valla de Melilla. Los muertos y heridos no fueron en las refriegas con su policía, sino por las avalanchas y caídas.
Las autoridades de Rabat han compartido con la diplomacia y con las fuerzas de seguridad españolas un vídeo editado de algo más de dos minutos con grabaciones de la mañana del viernes en el Barrio Chino de Nador, donde se ubica el puesto fronterizo que los subsharianos asaltaron.
Salto a la valla de Melilla
En esas imágenes (grabadas por las fuerzas de seguridad y las cámaras de seguridad del país vecino) se aprecia la envergadura de la avalancha humana que descendió del vecino monte Gurugú a la que se enfrentaron los centenares de agentes marroquíes a partir de las 8.30 horas de la mañana.
Las grabaciones, en las que se ve a inmigrantes supuestamente blandiendo palos y otros objetos contundentes, incluyen el momento en el que el vallado que corona el puesto fronterizo de Barrio Chino, y por cuyo tejado pretendían entrar los subsaharianos, cede por el peso de los inmigrantes, que acaban cayendo desde gran altura. Las autoridades marroquíes sostienen que todos los fallecidos se produjeron en esa caída masiva y en una avalancha en una vaguada cercana a la valla, de la que, al menos hasta ahora, no ha facilitado imágenes.
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Sara I. Belled, Clara Privé y Lourdes Pérez
Clara Alba, Cristina Cándido y Leticia Aróstegui
Javier Martínez y Leticia Aróstegui
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