La reina Sofía cumple 82 años volcada en apoyar causas sociales

Doña Sofía goza de buena salud y la segunda ola de la pandemia, lejos de retraerla, la ha llevado a salir del Palacio de la Zarzuela para mantenerse activa y en contacto con la ciudadanía.

En las últimas semanas, de la mano de la Fundación Reina Sofía, ha emprendido una gira por los bancos de alimentos de diversas comunidades autónomas para mostrar su compromiso con los más necesitados ante la profunda crisis en la que está sumido el país.

Ya ha visitado los almacenes de Albacete, Ciudad Real, Toledo, Murcia, Las Palmas y Lanzarote y planea ir en noviembre a los de Valencia y Sevilla si las condiciones sanitarias lo permiten.

Con la sonrisa por delante, aunque oculta tras la mascarilla, a la madre de Felipe VI se la ha visto charlar con los responsables de los bancos de alimentos y sus voluntarios para conocer de primera mano la labor solidaria de los que ella ha definido como «héroes».

«Es un encanto. Saluda a todo el mundo. Es un derroche de naturalidad, de clase y de saber estar», ha afirmado a Efe el presidente de la Federación Española de Bancos de Alimentos (Fesbal), Juan Vicente Peral, quien la ha acompañado en su gira.

Como botón de muestra del carácter de la reina, Peral ha comentado que en cada almacén de víveres, le han hecho pequeños regalos, «una pulsera, un pin..., y se los pone inmediatamente como agradecimiento».

Quienes coinciden con ella, destacan su «cercanía y proximidad», lo que le hace «tener el afecto del pueblo allá por donde va».

Este reconocimiento se tradujo en una cerrada ovación cuando asistió el 15 de octubre a una entrega de premios de pintura en el Teatro Real, acompañada de su hermana, la princesa Irene, su principal apoyo en los últimos años.

En su recorrido por España, donde en ocasiones ha viajado en AVE, la reina emérita ha mostrado de paso su respaldo al castigado sector de la hostelería y se ha dejado ver en restaurantes en Murcia y Toledo para degustar productos locales.

Como en los últimos años, doña Sofía mantiene su compromiso medioambiental y de lucha contra los residuos en el mar.

En agosto, participó en la liberación de una tortuga en Mallorca, y pocas semanas después, se enfundó los guantes como una voluntaria más para coger basura de una playa de Málaga.

Asistió a la ceremonia de entrega de los Premios Princesa de Asturias el 16 de octubre en Oviedo junto a los reyes y sus hijas, con quienes no aparecía en público desde hacía un año, si bien coincidieron unos días este verano en Palma en el Palacio de Marivent al poco de la marcha de España de Juan Carlos I.

La polémica por los presuntos negocios ocultos del rey emérito no ha afectado al estatus de doña Sofía, que mantiene su retribución del Estado, que este año ha sido de 111.854,88 euros.

No obstante, como miembro de la Familia Real no protagoniza un acto oficial desde comienzos de marzo, pocos días antes de que estallara la crisis de la covid-19.

A la madre de Felipe VI sí le han salpicado algunos comentarios de Corinna Larsen, quien, en una entrevista con Okdiario, la situó como parte de la «conspiración» que se urdió en el Palacio de la Zarzuela para que abdicara Juan Carlos I.

Larsen también reveló que llevaba 30 años separado de doña Sofía, por lo que «no la consideró una rival» en su relación íntima con el rey emérito.