El PP se prepara para romper con la era Rajoy por la 'operación Kitchen'

Pablo Montesinos sigue así la línea trazada por el portavoz de los populares y alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, quien dijo el pasado viernes el PP tendrá que «asumir» las consecuencias de la 'operación Kirchen'. Ni Almeida ni Montesinos se atrevieron a decir si la dirección del partido tomará medidas disciplinarias contra la ex secretaria general, Dolores de Cospedal, y el ex ministro del Interior Jorge Fernández Díaz. El fiscal pide al juez la imputación de ambos en la causa de la trama policial sufragada con fondos públicos para entorpecer la investigación judicial sobre la financiación del PP.

El responsable de Comunicación aseguró en Cuenca que su partido actuará con «ejemplaridad y transparencia» cuando llegue el momento de tomar decisiones al respecto. Pero de momento, añadió, respeta la presunción de inocencia de ambos dirigentes, ahora alejados de la primera línea política, y aguarda a que concluyan los procesos judiciales, es decir espera a ver qué decide el juez de la Audiencia Nacional. «El PP -subrayó- es un partido que da la cara, no como otros».

La dirección del PP estudia la estrategia para poner tierra de por medio con la etapa de Rajoy en el Gobierno, un paso que, reconocen fuentes populares, exigirá decisiones «dolorosas». Pero mantendrá la tesis de que es un asunto del pasado que en nada afecta a Pablo Casado y su equipo.

El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, un hombre cercano Rajoy, defendió ayer que «si un juez o un fiscal entiende que hay una cosa que tiene que ser investigada, hágase», pero sostuvo que «ni las épocas ni los hechos tienen que ver con la situación actual».