Los jueces corrigen a Interior y autorizan las protestas de Vox de este sábado en Cataluña

Según la orden emitida por el Ministerio del Interior, las manifestaciones eran «incompatibles» con los riesgos asociados a la pandemia y con las restricciones impuestas a la circulación de vehículos y personas en el estado de alarma. «Todo ello, unido a un déficit en cuanto a medidas de seguridad específicas», según señalaba la resolución. Vox impugnó la resolución desde el argumento de que a su juicio se estaba vulnerando el derecho de reunión y manifestación, reconocidos por la Constitución en su artículo 21.

Una manifestación en vehículos como la convocada, según señaló la formación de la ultraderecha, «no supone riesgos para el derecho a la vida y a la salud». Vox considera que el derecho de manifestación no está suspendido por el estado de alarma. Según la Fiscalía, la prohibición de la manifestación era «desproporcionada» y carecía de «justificación».

El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha dado la razón a Vox y a la Fiscalía y en una resolución conocida este viernes basa su argumentación en una reciente sentencia del Tribunal Constitucional del pasado 30 de abril. Admitir una prohibición basada en meras «conjeturas» supondría una «quiebra clara del derecho fundamental de reunión y manifestación pacífica, amén de un peligroso precedente», según el tribunal catalán.

Para el TSJC, la prohibición de una manifestación con fundamento en la necesidad de proteger el derecho a la vida y el derecho a la salud de las personas debe basarse en razones sólidas a propósito de la existencia de un riesgo cierto para tales derechos. «Las meras dudas no justifican la prohibición de una manifestación», afirma. «Aunque el derecho de reunión y manifestación no es ilimitado (recuerda), los «actos de prohibición de su ejercicio deben obedecer a una finalidad legítima y responder al criterio de proporcionalidad». Y además, señala que la prohibición de una manifestación basada en razones ciertas y atendibles, tampoco estará justificada si resulta posible, como alternativa, imponer medidas que permitan conjugar o armonizar el ejercicio del derecho de manifestación con la salvaguarda de los otros derechos que se suponen en riesgo.

La prohibición no puede considerarse proporcionada, según el TSJC, teniendo en cuenta que las cuatro capitales de provincia catalanas se hallan en estos momentos en una fase de desescalada situada entre el 0 y el 1 y su situación sanitaria, así como sus características, no ofrecen los inconvenientes que el Tribunal Constitucional pudo apreciar en el supuesto de la manifestación del Primero de Mayo que pretendía celebrarse en Vigo. «Hallándonos a las puertas de la quinta prórroga del estado de alarma, cabe constatar que la pandemia ha remitido considerablemente, presentando, pues, la situación sanitaria, un escenario sensiblemente mejor que el analizado por el Tribunal Constitucional respecto a la ciudad de Vigo», añade el tribunal.

«En el contexto que acabamos de describir no parece que sea de recibo prohibir una manifestación en vehículos cuando resulta que, ordinariamente, las personas pueden pasear por la ciudad durante franjas horarias generosas, sin límite numérico, bajo la única condición de hacerlo guardando las distancias y con mascarilla», remata. Y concluye que «nada indica que la manifestación en vehículos que pretende realizar Vox pueda traducirse en perjuicios significativos para la vida o la salud de las personas».

En la manifestación de Barcelona, convocada entre las 11:30 y las 12:30 saldrá de la Plaza Francesc Macià y a través de la avenida Diagonal pasará por el paseo de Sant Joan, la calle Diputación y Roger de Llúria, hasta la Delegación del Gobierno en Cataluña, en la calle Mallorca. Todo el recorrido transcurrirá por el centro y el Eixample.