El Gobierno denuncia a Vox por el «ataque racista» a los menores migrantes

El Ejecutivo considera que hay líneas «que no se pueden cruzar» y avisa a Vox de que va a estar «ojo avizor» para actuar en cuanto incurra en discursos de «odio» para impedir que estos menores «no sean de modo alguno señalados por los fascistas». «Ahí nos van a encontrar al ministro y a las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado porque cuando se ponen el uniforme es con los valores constitucionales y no con los valores de aquellos gobiernos de hace 40 años que ustedes echan de menos», advirtió el titular de Interior, Fernando Grande-Marlaska.

El Gobierno salió en tromba contra la formación ultraderechista después de que su portavoz parlamentario, Iván Espinosa de los Monteros, aprovechara la sesión de control para introducir en el debate el gasto que supone la manutención de los menas. «Lo que han hecho con esos carteles señalando a unos niños que vienen a nuestro país en situaciones terribles se llama inhumanidad», le recriminó la vicepresidenta Carmen Calvo.

La número dos del Ejecutivo resaltó que España es una «gran democracia» y lamentó las «falacias» que, en su opinión, esgrime Vox. Más contundente aún se mostró la vicepresidenta segunda, Nadia Calviño, que despachó la intervención de Espinosa de los Monteros con los calificativos de «repugnantes, racistas, homófobos, machistas y xenófobos» o la ministra de Defensa, Margarita Robles, para quien la campaña está «fuera de los estándares mínimos de cualquier democracia». «Es un ataque a los niños y las niñas más vulnerables de nuestro país», censuró Belarra.

El líder del PP, Pablo Casado, afeó a los de Abascal su «publicidad engañosa» y tachó de «irresponsable» pretender enfrentar a los ciudadanos por un tema «que en Madrid representa a 260 personas». «Hay que ser solidarios», insistió.

Según los datos de los Servicios Sociales de la Comunidad de Madrid, los menores extranjeros no acompañados tutelados por la administración autonómica son apenas 269, el 7,2% del total en España, y aunque en cada caso el gasto de alojamiento y manutención es diferente, rondaría los 4.200 euros de media.