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efe
Madrid
Lunes, 6 de noviembre 2017, 10:02
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha asegurado que el Gobierno respeta las decisiones de la Justicia belga sobre el expresidente de la Generalitat de Cataluña Carles Puigdemont y de los otros cuatro exconsejeros que se encuentran en ese país.
Santamaría ha ... precisado, a su llegada a un encuentro con el presidente de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, que Bélgica es "un sistema tan democrático" como el español. Así se manifestó al ser preguntada por su opinión sobre la decisión adoptada ayer por el juez belga, que decretó medidas cautelares contra Puigdemont y sus exconsejeros hasta que se resuelva la orden de detención y entrega emitida por España.
"Por parte del Gobierno y dado que estamos hablando de un sistema democrático, tan democrático como el español, el máximo respeto a las decisiones de los jueces en España y en Bélgica y en todos los Estados que respetamos la separación de poderes y la independencia judicial", ha recalcado la vicepresidenta.
Y ha insistido en que respeta la "manera de actuar de la Justicia belga y de la española", aunque ha matizado que desconoce cuáles van a ser los plazos que se aplicarán en Bélgica para resolver sobre la petición de España.
Santamaría no ha querido responder al ser preguntada sobre la posibilidad de que el "presidente Puigdemont" haga campaña desde Bélgica para las elecciones autonómicas del 21 de diciembre. Pero sí ha querido matizar la pregunta: "expresidente Puigdemont".
El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha afirmado que la aplicación del artículo 155 de la Constitución terminará con la celebración de las elecciones del 21 de diciembre y con la constitución del nuevo Gobierno de Cataluña, aunque éste sea independentista. En este sentido, ha afirmado que este precepto de la Carta Magna se ha aplicado porque ha habido "deslealtad" constitucional y autonómica, no por la ideología del Govern que lideraba Carles Puigdemont.
En un desayuno informativo de Forum Europa en Bilbao, Catalá ha considerado que "la orden europea de detención y entrega" de Puigdemont y sus exconsellers por parte de Bélgica "tendrá un buen fin y acabará resuelta favorablemente". También ha destacado que éstos mantienen "sus derechos políticos intactos" hasta que no haya una sentencia de inhabilitación contra ellos, por lo que podrán concurrir como candidatos a los comicios del 21-D.
El ministro ha señalado que la aplicación de las medidas del 155 se ha hecho de forma "moderada y prudente" para "restaurar la legalidad constitucional y estatutaria en Cataluña". Su pretensión, según ha especificado, ha sido garantizar "los derechos de los ciudadanos que habían sido alterados como consecuencia de unas decisiones del Parlamento y del Gobierno de la Generalitat, que habían violentado derechos de gran parte de la población mediante decisiones absurdas". "Esa alteración del orden constitucional y estatutaria se ha producido, y las elecciones convocadas para el 21 de diciembre generarán un nuevo Parlamento y un nuevo Gobierno con las mayorías que se puedan conformar", ha añadido.
De esta forma, ha explicado que "el hecho de que pueda conformarse en el futuro un Gobierno de carácter independentista, no justifica ni motiva en absoluto la adopción de medidas tan importantes como las que conlleva el artículo 155 de la Constitución". Por ello, ha asegurado que este precepto de la Carta Magna no se establece porque haya un Gobierno independentista, sino "por las acciones que pueda adoptar de incumplimiento de sus obligaciones".
El ministro de Economía, Luis de Guindos, ha descrito que Puigdemont está haciendo "una pantomima" y ha expresado su "absoluta confianza" en la separación de poderes ante la situación judicial que enfrenta el exmandatario en Bélgica.
"Yo creo que lo que está haciendo el señor Puigdemont es una pantomima y, en última instancia, lo que pone de manifiesto es la farsa de todo lo que está haciendo", ha dicho De Guindos a su llegada a la reunión de ministros de Economía y Finanzas de la eurozona que se celebra este lunes en Bruselas.
El ministro ha instado a "cumplir la legalidad española" y ha afirmado que tiene "absoluta confianza en la división de poderes, en el Estado de Derecho y en el cumplimiento de la legalidad" que, según ha considerado, "es lo que debe garantizar la convivencia futura de todos".
El ministro ha confiado también en que, si se soluciona la cuestión catalana, el impacto sobre el PIB español será limitado. Incluso ha rehusado pronunciarse sobre los recientes comentarios de Elio Di Rupo, ex primer ministro socialista belga, que calificó de "autoritaria" la actuación del Gobierno central; pero sí ha señalado que, "más allá de algunos comentarios anecdóticos", hay un "enorme apoyo internacional que tiene el cumplimiento de la legalidad por parte del Gobierno español".
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