Errejón ficha a Bescansa para encabezar la lista por La Coruña

La formación, que debutará en las generales del 10-N bajo el liderato de Íñigo Errejón, vive estos días una carrera contrarreloj por configurar sus listas, que deberán estar cerradas y entregadas a las respectivas juntas electorales provinciales como muy tarde el próximo lunes. Y con un aparato a nivel nacional organizando apresuradamente, buscan petróleo en su antigua casa. Además de Bescansa, los últimos nombres de peso en conocerse tienen un denominador común, han militado en Podemos.

Es el caso de la senadora Esperanza Gómez, que será cabeza de lista por la circunscripción de Sevilla; la exdiputada Ana Terrón, que encabezará las papeletas en Granada; y Carmen Lizárraga, exparlamentaria de Adelante Andalucía que ahora dará el salto a la política nacional como candidata al Congreso por Málaga. Tres provincias en las que se presentan en coalición con Equo.

Los movimientos no deberían sorprender a Pablo Iglesias, ya que Terrón y Gómez se sumaron a la corriente de apoyo a Íñigo Errejón para liderar Podemos en Vistalegre 2, en febrero de 2017. El partido llegó fracturado al congreso y acabó acaudillado bajo el mando de Iglesias, que logró imponer su tesis, pero la herida no se suturó.

Lizárraga, en cambio, no estaba presente en la lista de Errejón para el Consejo de Ciudadano del partido que se eligió en Vistalegre 2, pero sí firmó el manifiesto 'Recuperar la ilusión', ligado a la corriente 'errejonista'. Pese a la derrota, las tres decidieron quedarse en Podemos.

Los 'errejonistas' pidieron en aquella ocasión una opción «más realista» para convertirse en un partido «con posibilidades de ganar». Justo algo parecido de lo que esta semana ha pregonado el líder de Más País, «hay que hacer política útil, sentarse a hablar. Por eso no hay que romper los puentes. Es importante anteponer los intereses del país a los intereses de las siglas». Un argumento que contrasta con el de Iglesias, que este miércoles respondió a su exnúmero dos que «esto no va de regalar gobiernos». Así que, de alguna forma, las dos posturas antagónicas de Vistalegre vuelven a batirse dos años después.

Otra de las firmantes de aquél manifiesto fue Rita Maestre, que abandonó Podemos junto a Íñigo Errejón para concurrir en las listas de Más Madrid para las municipales y autonómicas del pasado mayo. Sin embargo, ella mantendrá, si no hay cambios de última hora, su puesto como portavoz del grupo en el Ayuntamiento de la capital.

De Lizárraga y Gómez cabe destacar que también lideraron, un año antes de dicho congreso, una candidatura para arrebatar el liderazgo de Podemos en Andalucía a Teresa Rodríguez, ligada esta a los anticapitalistas. Los errejonistas perdieron aquella confrontación al ir divididos con dos candidaturas. Hasta que el pasado enero Lizárraga abandonó su escaño como diputada autonómica por «distanciamiento» con la dirección andaluza del partido.

De Ana Terrón, en cambio, solo se puede hablar de deserción por la carga simbólica de su fichaje por Más País. La política granadina ya había abandonado Podemos tras las generales del pasado mes de abril después de haber obtenido un escaño de diputada por el partido morado en las elecciones de 2015 y 2016.

Los movimientos han sido contestados desde Unidas Podemos con una mezcla de cautela e indiferencia.«De momento solo se han ido tres», restó importancia ayer su portavoz en el Congreso, Irene Montero, en una entrevista en la cadena Ser. Desde la formación morada la consigna sigue siendo la de mantener el alto el fuego. «Creo que no nos costará negociar con Errejón», añadió Montero.

Los movimientos han sido contestados desde Unidas Podemos con una mezcla de cautela e indiferencia. «De momento solo se han ido tres», restó importancia este viernes su portavoz en el Congreso, Irene Montero, en una entrevista en la cadena Ser. Desde la formación morada la consigna sigue siendo la de mantener el alto el fuego. «Creo que no nos costará negociar con Errejón».