Ciudadanos lleva a la Fiscalía el acoso a sus dirigentes en el desfile del Orgullo

Ciudadanos denuncióeste martes ante la Fiscalía el acoso que sufrió su comitiva durante el desfile del Orgullo del pasado sábado en Madrid, y por el que la formación liberal ha exigido la dimisión de Fernando Grande Marlaska. Acusa al ministro del Interior de haber «alimentado el odio» y puesto a sus dirigentes en la «diana» de los violentos, tras asegurar éste que pactar con Vox tendría consecuencias.

Según señaló Albert Rivera este martes, durante la marcha sus compañeros de partido sufrieron «agresiones, insultos y vejaciones» que se trasladaron al Ministerio Público ante una posible comisión de los delitos de odio, amenazas, calumnias e injurias. «A nosotros nadie nos echa de una manifestación del día de la libertad. Este es el partido de los valientes y de la libertad y, si piensan que por mucho que nos insulten y botellas que tiren, nos vamos a ir, no conocen a este partido», defendió el presidente de los liberales.

En la comitiva de Ciudadanos se encontraban los diputados Inés Arrimadas, Marcos de Quinto, Patricia Reyes y Miguel Gutiérrez, además de la vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís. En un momento de la marcha, un grupo de participantes bloqueó el paso de los dirigentes de Ciudadanos que, tras ser insultados y recibir, según denuncian, botellazos, abandonaron a las dos horas la manifestación escoltados por efectivos de la Policía Nacional.

Villacís puso el lunes en duda la celeridad de las fuerzas de seguridad a la hora de actuar. Lo hicieron «de una forma muy ineficiente cuando podía pasar cualquier cosa», dijo la número dos del ayuntamiento de la capital en TVE.

Un informe policial contradice estas acusaciones. Según fuentes del cuerpo citadas por 'El País', no hay constancia de que produjeran agresiones físicas y desde Ciudadanos se desatendieron las instrucciones y consejos policiales.