Aragonès se propone agotar la legislatura con un Govern monocolor

En cambio, la portavoz del Gobierno catalán, Patrícia Plaja, ha puesto como ejemplo que Aragonès fue investido con los votos de Junts y la CUP, que este año sacará adelante los presupuestos con el apoyo de PSC y los comunes y que la renovación de cargos de algunos organismos autonómicos, como TV3, Catalunya Ràdio, el CAC o el Síndic de Greuges, se llevó a cabo con un pacto entre PSC, ERC y Junts. Este gobierno se siente «cómodo», según su portavoz, porque sabe llegar a grandes acuerdos.

En principio, el pacto presupuestario con los socialistas no altera la hoja de ruta soberanista de este ejecutivo, que mantiene su compromiso de avanzar en el ejercicio de la autodeterminación. En este sentido, Plaja ha anunciado que, en las próximas semanas, Aragonès reactivará los trabajos para buscar un amplio consenso entre las fuerzas soberanistas en torno a un acuerdo de claridad a la canadiense. Esta será la propuesta de referéndum que trasladará a Pedro Sánchez. De momento, solo los comunes le compran la idea de un referéndum acordado. La CUP aboga por un nuevo 1-O y Junts está a la espera de la resolución del caso Puigdemont para reactivar la declaración unilateral de independencia de 2017. La presidenta de Junts, Laura Borràs, ha acusado este martes a Pere Aragonès de dinamitar la unidad del independentismo al pactar las cuentas con el PSC. El Govern ha replicado que quien rompió el Govern fue Junts, con su decisión de salir del mismo.