Más de la mitad de los muertos en carretera en 2020 viajaba sin cinturón

Por ello, la Asociación Española de Entidades Colaboradoras de la Administración en la Inspección Técnica de Vehículos AECA-ITV pone el foco en las cifras de siniestralidad de las furgonetas para concienciar sobre la importancia de la seguridad de estos vehículos comerciales que pasa por tener la ITV vigente.

De acuerdo con datos de la Dirección General de Tráfico, DGT, durante el último año 475 personas fallecieron en accidentes en los que se vieron implicados turismos y furgonetas, el 54.5% del total de víctimas mortales en las carreteras españolas durante el 2020. Pero quizás uno de los datos que más preocupa a las autoridades es el incremento de la no utilización del cinturón de seguridad entre los fallecidos en este tipo de vehículos; pues el 26% de las víctimas mortales no lo usaban, frente al 22% en 2019.

Aunque las principales causas de los accidentes en los que se ven implicadas furgonetas son humanas, tales como la conducción distraída (30% de los accidentes), no respetar el intervalo de seguridad (29%), el incumplimiento de la prioridad (18%) y la velocidad inadecuada (13%); hay otros factores que también juegan un papel importante en la siniestralidad.

Las cifras presentadas en el Observatorio Nacional de Seguridad Vial en el año 2018, muestran que el 10% de las furgonetas implicadas en accidentes mortales en vías interurbanas tenían la ITV caducada. Un número que presumiblemente habrá aumentado en los últimos meses, si se tienen en cuenta los datos de absentismo presentados recientemente por AECA-ITV que muestran que en la actualidad 45 de cada 100 vehículos que circulan por las carreteras no tienen la inspección técnica en regla.

Además, de acuerdo con ese mismo informe, la antigüedad del parque de estos vehículos de transporte y reparto de mercancías se ubica en 11,6 años, lo que hace aún más relevante prestar atención a sus condiciones. Es un hecho que mientras más años tenga el vehículo, mayor es el porcentaje de averías que presenta, poniendo en peligro tanto a su conductor como a los demás usuarios de las vías.

La ITV no solo sirve para verificar el correcto estado de un vehículo; se trata de un instrumento cuyo principal objetivo es salvar vidas. De acuerdo con el más reciente estudio de la Universidad Carlos III sobre Contribución de la ITV a la Seguridad Vial y Medio Ambiental, las Inspecciones Técnicas de Vehículos evitan al año 539 víctimas mortales, cerca de 12.100 heridos de distinta consideración y al menos 17.700 accidentes de tráfico. Y, si el total de los vehículos que no acuden a las inspecciones obligatorias lo hubieran hecho, podrían haberse evitado al menos 8.800 accidentes, más de 7.000 heridos y 161 muertes adicionales.