Lamborghini se niega a deshacerse del motor térmico

A pesar de que la Comisión Europea propusiera 2035 como el límite temporal para vender motores térmicos y que Lamborghini esté desarrollando su propio modelo cero emisiones, Bruselas también ha sido laxa en el pasado, sin imponerle límites de contaminación a marcas que no superasen cierto umbral de ventas. En 2021, Lamborghini matriculó 8.405 unidades, un 13% más, de las cuales más de 5.000 fueron de su SUV, Urus.

El directivo alemán declaró que «después de la hibridación, veremos si es posible seguir vendiendo coches con motores de combustión más allá del 2030. Una posibilidad de mantener estos órganos vivos es a través de los combustibles sintéticos».

Alemania, el principal país productor de automóviles de la Unión Europea y uno de los que más ha criticado la prohibición de Bruselas, ya ha hecho concesiones para las propulsiones que estén basadas en biocombustibles más allá del año 2035. La patronal de automoción europea, ACEA, está bajo la presidencia del consejero delegado de BMW, Oliver Zipse.

De cara a 2024, Lamborghini —filial de Audi— pretende contar con una gama electrificada y reducir el CO2 de sus modelos en al menos un 50% a partir de ese año. Para ello, la marca ha dispuesto 1.500 millones de euros para desarrollar la electrificación, atendiendo especialmente al desarrollo de compuestos livianos de fibra de carbono para compensar el peso añadido.

Este plan fue detallado en 2021 con su estrategia Direzione Cor Tauri, que hacía referencia a la estrella de la constelación de Tauro. La primera fase de su estrategia será un último adiós al V12, uno de los propulsores más celebrados del fabricante. De cara a la segunda mitad de la década,