Un viaje a Lourdes para encontrarse con amigos y con el compromiso

La próxima peregrinación a Lourdes se llevará a cabo del 18 al 22 de mayo de sábado a miércoles. En los últimos años han contado con 325 peregrinos de los cuáles 90 son enfermos o discapacitados, 100 peregrinos que acompañan a la hospitalidad sin una misión específica y cerca de 130 hospitalarios o auxiliares que acompañarán, atenderán y cuidarán de los enfermos durante el viaje.

«La hospitalidad es una asociación de fieles cristianos vinculada a la Diócesis de León», explica Oliva Fernández, presidenta de la Hospitalidad de Nuestra Señora de Lourdes en León. En el viaje «hay diferentes servicios, aquellos que ayudan y acompañan a personas con mayores necesidades suelen estar relacionadas con la sanidad, pero el resto aunque nos llamemos auxiliares no tenemos conocimientos médicos más allá del cuidado y la atención a otra persona».

Ya son 46 años los que la Hospitalidad peregrina a Lourdes, pero «siempre hay algo novedoso» y este año cuentan «con mucha ilusión por la proyección» esperando que anime a más leoneses a conocer el peregrinaje y la asociación.

Ocho autobuses, dos de ellos adaptados para discapacitados, saldrán de León el sábado a las 8:00 de la mañana y con tan sólo una parada llegarán al destino a primera hora de la tarde.

A la salida aquellos peregrinos que realizan el viaje como auxiliares dispondrán ya de unos sobres con sus nombres y los trabajos asignados para el cuidado de los enfermos, también la identificación personal y las pegatinas de las maletas.

Los auxiliares ayudan a los enfermos a subir a los autobuses asignados y a recoger o colocar las maletas, desde el primer momento del viaje la solidaridad inunda los corazones.

En su llegada a Lourdes, se alojan en un centro de acogida y cada hospitalidad tiene asignada una planta, en los días que pasan allí tienen diferentes eucaristías, en ocasiones propias y en otras con el resto de peregrinaciones.

Procesiones eucarísticas o diferentes actos religiosos llenan los días, pero también comparten sus momentos libres con actividades lúdicas en las que todos los peregrinos se conocen y disfrutan de este viaje tan especial.