El TSJ confirma los 25 años y medio de cárcel para el acusado de matar a su casera en León

El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León desestima «totalmente» el recurso de Ángel M.B. contra la sentencia de la Audiencia Provincial de León y «confirma» en su totalidad la resolución de la sala. Además, suma a la misma las costas del recurso, incluidas las causadas por las acusaciones particulares.

La Audiencia Provincial de León condenó el 24 de abril a una pena de 25 años de cárcel a Ángel M.B. por los delitos de asesinato con alevosía y ensañamiento y robo con violencia en casa habitada. Así lo recogía la sentencia y lo ha ratificado el TSJCYL.

El autor de la muerte de Conchi, su casera, le asestó 52 puñaladas en el interior de su domicilio de León en 2020, cuando se cumplían las primeras semanas de confinamiento por covid-19. La pena por el asesinato es de 21 años de prisión y la del robo con violencia asciende a cuatro y medio.

El acusado interpuso un recurso de apelación de la sentencia y alegó, como motivos de impugnación, los de vulneración de precepto constitucional, derecho a la judicial efectiva y derecho a la presunción de inocencia.

Por todo ello, insistió en que «existe causa de atenuación de responsabilidad» en el acusado y el recurso pedía que las agravantes de «alevosía» y «ensañamiento» fueran retiradas. Tras el estudio del caso por el TSJCYL se ha emitido un nuevo fallo en el que se confirma de manera íntegra lo expuesto por el magistrado de la Audiencia Provincial de León.

También se le condena a indemnizar a los dos hijos y la pareja de la víctima con una cantidad global que asciende a 108.000 euros, además de a pagar las costas del juicio. Contra esta sentencia se puede interponer recurso de apelación ante la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León.

La víctima recibió una veintena de puñaladas cuando aún estaba viva y el resto ya fallecida, infringidas con una navaja o cuchillo de al menos 2,5 centímetros de ancho y de longitud desconocida. El acusado fue detenido en febrero de 2022, tras comprobarse la coincidencia de su ADN con el de las muestras de sangre recogidas en el lugar de los hechos.

Entonces, reconoció haber apuñalado en dos ocasiones a la mujer, de 65 años, y dijo no recordar el resto. Sí relató que había perdido los nervios tras mantener previamente con ella una discusión, dado que según su relato, le habría amenazado «tirarle del piso» que le tenía alquilado.

• Temas
• Audiencia Provincial de León
• Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL)
• Tribunales