El Tribunal Supremo emplaza a jueces y magistrados a preservar el «islote de libertad» que germinó en León hace casi 1.000 años

El escenario, la Real Colegiata de San Isidoro, el mismo que albergó bajo el reinado de Alfonso IX la primera curia regia en Europa a la que se sumaban representantes electros de las ciudades con voz y voto.

Un hito que ha servido al presidente de la Sala Primera del Tribunal Supremo, Francisco Marín Castán, para lanzar un guante a su ‘colegas’, a los que ha empezado a luchar y trabajar por preservar esa libertad que un día emergió en León.

“Estos días en León nos debe servir para recordar que aquí emergió un islote de libertad en Europa y que 1.000 años después hay que ser vigilantes para no perderla”, señaló Castán, que hizo alusión al libro de Claudio Sánchez-Albornoz ‘Sobre la libertad humana en el reino asturleonés’ para evocar a la ‘cuna del parlamentarismo’, hoy reconocida por la Unesco.

Un libro que, según remarcó, escribió desde el exilio y explicar el por qué León debe formar parte de la memoria de la humanidad. La razón no es otra, continuó, que el nacimiento de una nueva clase de hombres libres “muy superior a la de otros territorios”.

Un hito que también centró el discurso de bienvenida del presidente del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, José Luis Concepción, que remarcó cómo en el claustro de la Real Colegiata de San Isidoro se alumbraron los Decreta, el compendio legislativo de derechos de la persona y los bienes del patrimonio, “antecedentes de todos los códigos de derecho fundamentales”.

“Alfonso IX decía que no adoptaría una decisión de paz, pacto o guerra sin contar con el clero, los nombres y los hombres nuevos”, remarcó Concepción, que felicitó a la presidenta de la Audiencia Provincial de León, Ana del Ser, por la elección del escenario para la celebración de estas jornadas.

Una actividad extraordinaria que pretende acercar más la labor de los magistrados de la Sala Primera del Supremo a los integrantes de la carrera judicial, en particular a jueces y magistrados de Primera Instancia y Audiencia Provinciales y que, según remarcó Concepción, no solo permite arrojar luz sobre la evolución de la jurisprudencia sino que es clave para garantizar la independencia de la Justicia.

Jornadas que se prolongarán hasta este viernes y en las que se abordarán cuestiones relativas al derecho de familia, como la guardia y custodia compartida o la pensión compensatoria, y que podrán el foco en la protección de los consumidores, con las preferentes, las subordinadas o los contratos bancarios en el programa.

Al inicio de las jornadas, Del Ser remarcó la labor fundamental del Consejo General del Poder Judicial en la formación continuada de los jueves, en los que se invierten muchos esfuerzos y presupuestos y que es “esencial”.

Asimismo, destacó la trascendencia del trabajo de los responsables de la Sala I del Tribunal Supremo para la adaptación de las normas ante los cambios de la sociedad y marquen las líneas para unificar las resoluciones del resto de los tribunales del país.

“Hay tanta variación entre los temas con lo que habitualmente trabajamos que los jueces agradecemos enormemente que nos aclaren su jurisprudencia y podamos ver de primera mano por dónde van a evolucionar esas líneas”, señaló Del Ser, que incidió en la implicación de los jueces en la protección de los consumidores, principalmente en torno a las cláusulas abusivas.

En este sentido, la presidenta de la Audiencia Provincial de León remarcó la necesidad de la creación de nuevas plazas para una provincia que presenta una carga de trabajo “asumible” pero que presenta un porcentaje por encimad e la medida autonómica en reclamaciones de cláusulas abusivas.