

Secciones
Servicios
Destacamos
Acabaron el 2021 mal y empiezan el 2022 «peor». Esa es la sensación que vive el trasnporte leonés, que cuenta con más de 3.000 puestos de trabajo directos en León que tratan de sobrevivir a un incremento generalizado de los precios de suministros básicos para su actividad profesional.
El principal es el combustible, con una incesante escalada de precios en cada gasolinera que está siendo un auténtico dolor de cabeza para los transportistas leoneses. Pablo Lorenzo, de Altradime, reconoce que la situación es complicada y «el conflicto en Ucrania lo va endurecer más».
Desde la Asociación Leonesa de Empresarios del Transporte lamentan ese aumento de precios en el combustible, que estiman que es de 1.200 euros al mes por camión respecto a un año. «No sabemos cómo hacer frente a esto», ha asegurado.
Lorenzo lamenta que siempre se eche la culpa al transporte de la subida de los precios en los supermercados y tiendas pero «somos los últimos en aumentar el precio de nuestros servicios». «No podemos entrar en pérdidas. Si todo sube, nosotros también lo tenemos que hacer», explica Lorenzo.
A ello se suma el incremento del precio edl AdBlue, un líquido accesorio para el mantenimiento de estos vehículos que «ha pasado de 25 céntimos el litro a 55». «Es insostenible que doble su precio en menos de un año», insiste Lorenzo, que también señala al gas, «la alternativa a la gasolina».
«Nos vendieron que iba a ser el futuro, pero el kilo de gas vale el doble que el de gasolina. No lo podemos asumir», ha sostenido el representante de Altradyme, que tiene un mensaje claro: «Si no puedo pagar, no puedo transportar».
A ello se suma el incremento en el precio de los peajes de las autopistas, de elementos para el mantenimiento de los vehículos como el aceite o de los servicios de los talleres.
Es por ello que pide a las administraciones que les dejen trabajar y sean más laxos con el sector: «Cada camión que se por la carretera paga hasta 17 impuestos diferentes. No hacemos más que pagar».
Así, reclaman algún tipo de medidas para compensar la subida del precio de los combustibles sabiendo que «un Gobierno poco puede hacer para controlar lo que se paga por el petróleo» y que las subvenciones que llegan desde Europa para el sector se repartan con agilidad.
«Somos el eslabón más débil de la cadena de suministro. El transporte está compuesto de muchas empresas pequeños, no tenemos esa unión y, por tanto, apenas tenemos capacidad de negociación. De esa debilidad, se aprovechan», ha finalizado Pablo Lorenzo, que espera que existan soluciones para aplacar ese incremento constante en el precio de todos los suministros.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para registrados.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.