Secciones
Servicios
Destacamos
Los trabajadores de Atento León han vuelto a salir a las calles la tarde de este miércoles 10 de julio en busca de «un altavoz» que haga llegar las denuncias de sus trabajadores.
Amaya Bárbara Martínez, secretaria de la sección sindical de UGT Atentos León, ha sido la portavoz del acto que ha congregado a decenas de personas de todas las edades que, aún sin comprender los motivos, se encontraban «desconcertadas» por la situación.
Los trabajadores de la empresa, ubicada en el polígono industrial de Trobajo del Camino se encontraron hace unas semanas con la «sorpresa» del traslado geográfico para reubicación de gran parte de los puestos laborales de la empresa. Una medida que, según ha denunciado Martínez, se toma para »lavarse las manos» ante una situación que es «imposible de gestionar». «La mayoría de los trabajadores llevamos años dedicándose a la empresa y hemos formado nuestras familias aquí», denuncia.
La leonesa, que ha trabajado en la empresa desde hace más de 16 años asegura que se trataba de «una muerte anunciada». Tras una entrevista de uno de los CEO en la empresa avisando de la implantación de maquinaria que sustituirá a gran parte de la plantilla de las sedes de la empresa repartidas por España, la trabajadora no dudó de «lo que se venía».
Un momento de «frustración» en el que pide que la gestión no se realice de esta manera. «Si nos quieren echar que nos echen, pero que no lo llamen de otra forma», explica.
Las manifestaciones, que comenzaron el pasado martes 9 de julio a las 10:00 horas en las puertas de subdelegación son «un paso» para que las grandes esferas de la empresa escuchen a los trabajadores. «La negociación aún está sobre la mesa», indica. Una reunión que tendrá lugar mañana en Madrid y a la que es «imposible» acudir por parte de los afectados leoneses. «La empresa cubre los gastos pero muchos de nosotros tenemos situaciones familiares complicadas», añade.
La preocupación y la «rabia» por no poder actuar ante una «injusticia», crece con el paso del tiempo. «Lo que quieren es que la gente se vaya por su propio pie y por su situación personal», indica. Traslados de León a Madrid en los que las condiciones laborales varían pero «sin cumplir los mínimos para poder aumentar la calidad de vida e igualarla allí».
Seis centros afectados entre los que dos de ellos cierran. Uno de ellos en la provincia de León. Los afectados suman un total de 138 con 8 personas en puesto de coordinación que se quedan en León pero sin opción para el resto.
Despidos «sin consecuencias» en los que, según denuncian los trabajadores, la movilidad geográfica «solo es una forma de taparlo».
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.