Tercera Actividad León celebra el 'Día de los Abuelos'

Cuenta una antigua leyenda china que cuando las vidas de dos personas están destinadas a entrelazarse, nace un nexo afectivo entre ambas que las une mediante un hijo rojo. El hilo, que existe independientemente del momento en que las personas se conozcan, puede tensarse o enredarse, pero nunca, jamás, podrá romperse.

Rememorando esta antigua creencia, las personas de Tercera Actividad han regalado a sus seres queridos pulseras tejidas con cinta roja, «en honor a los vínculos que los unen y como símbolo de su cariño y afecto». Como el que se profesan Emilia y su hija, que hoy se han reencontrado de nuevo en el centro, como otros muchos residentes.

No solo han compartido las pulseras, sino que también, aprovechando el buen tiempo, han disfrutado de varias actividades al aire libre: la actuación del coro de Tercera Actividad y un cuentacuentos a cargo de Txirispita que ha contado las «historias de Aniceta Pizpireta», con las que ha entretenido a un público entregado desde el primer momento.

«Para nosotros es fundamental que las personas que han decidido vivir aquí, sigan en contacto con su entorno más cercano. Es una forma de sentirse activos y útiles, saber que forman parte de la sociedad», explica Marta Prieto, directora de Tercera Actividad León, quien se mostraba satisfecha y agradecida por la buena acogida que ha tenido la celebración del Día de los Abuelos, entre residentes y familias.