Suspenden por segunda vez el juicio por la brutal paliza a dos policías locales en León

El Juzgado de León acogía este viernes, 21 de junio, la vista oral por la brutal agresión que dos policías locales sufrieron en 2020, en plena pandemia, cuando se dirigieron a la terraza de un bar para reclamar el uso de mascarillas y la distancia de seguridad a un grupo de clientes.

Se trataba de la segunda fecha que se establecía para el caso aunque, por segunda vez, la sesión ha sido suspendida.

En la primera cita, el 20 de mayo, el juez se sintió indispuesto y tuvo que decretarse nuevo día. Y este 21 de junio ha sido la ausencia de dos testigos directos lo que ha llevado al magistrado a entender conveniente una nueva suspensión.

El periodo vacacional en los Juzgados de León postergará ahora la vista oral hasta el 15 de noviembre.

En los meses más complicados de la pandemia, y con todavía numerosas restricciones de distancia social y uso obligatorio de mascarilla, un grupo de personas se encontraba en la terraza de un bar pulpería situado en la avenida de Antibióticos, número 24, sin cumplir la normativa sanitaria y escuchando música, por lo que se requirió la presencia de los agentes.

La patrulla se acercó a estos individuos -aproximadamente una quincena- y fueron golpeados «de forma sorpresiva», según recoge el escrito de conclusiones provisionales, por 12 personas, cayendo al suelo, donde también fueron golpeados, perdiendo uno de ellos la consciencia.

Los agentes de la Policía Local de León sufrieron heridas de diversa consideración. Uno de ellos tuvo contusiones en el pabellón auditivo derecho, la región occipital derecha, la pirámide nasal, la región melar derecha y cervicalgia, requiriendo de tratamiento médico y 60 días para la curación sin tener secuelaes. El otro sufrió una herida contusa en el arco supercirial derecho, cervicalgia, contusiones en la región occipital derecha, pirámide nasal y arco mandibular izquierdo, con rotura parcial de dos molares, requiriendo 87 días de curación y manteniendo secuelas. Los agentes pasaron la noche ingresados en el Hospital de León.

Estos hechos son constitutivos de un delito de lesiones y atentado a la autoridad, por lo que fiscalía y acusación particular solicitan penas de tres años de prisión para cada uno de los 12 implicados en la agresión. Por su parte, las defensas, salvo en uno de los casos que reconoce los hechos, reclaman la libre absolución y se desligan de la brutal paliza.

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