IGC solicita que no se aplique el código penal militar a los agentes de la Guardia Civil

IGC ha trasladado a la necesidad de ampliar las actuales plantillas en todo el territorio comunitario, ya que a pesar de estar en buenos números de cobertura, las mismas se antojan cortas para potenciar un mejor servicio al ciudadano.

En ese punto, se abordó la posibilidad de incentivos similares a los que ofrece la Comunidad de Madrid a la GC y el CNP, con medidas de bonificación de servicios en zonas rurales como pueden ser alquileres o asistencia escolar a los hijos de los agentes, que en la mayoría de los casos, no se desplazan con sus familias a estas zonas por la escasez de oportunidades y la despoblación de las zonas, lo que permitiría a su entender abordar de cierta manera el tema de «la España vaciada».

En aspectos mas genéricos sobre la situación actual del Instituto Armado, Independientes de la Guardia Civil (IGC), expuso la escasez de medios actual, con vehículos desfasados, con gran carga de kilometraje, la necesidad de chalecos antibala personales, muchos de los cuales han sido retirados a los Agentes que ya los tenían adjudicados por falta de previsión en la gestión de los mismos, así como la necesidad de inversión económica en los Acuartelamientos, con un gran número de los mismos contruidos antes de 1970, con la una atesorada falta de mantenimiento y actualización.

En el punto mas destacado, hemos solicitado que se traslade la imperiosa necesidad de la retirada del Código Penal Militar en la Guardia Civil en su aplicación cotidiana, dejando el mismo para aplicarse apenas cuando los agentes o Unidades se integren en las Fuerzas Armadas para su cumplimiento de misiones de carácter militar que le sean encomendadas. IGC, considera que su aplicación actual dista mucho de ser coherente en un cuerpo policial moderno, donde un agente de la Guardia Civil, puede acabar en prisión por una simple discusión con un superior, incluso fuera de servicio.