Los sindicatos convocan a León a una gran manifestación por su futuro el 10 de noviembre

Unión sindical para programar la cuarta gran manifestación de los últimos años por el futuro de León. Los cuatro sindicatos mayoritarios de la provincia -CCOO, UGT, USO y CGT- llaman a la sociedad leonesa a manifestarse el domingo 10 de noviembre a las 12.00 horas en las calles de la capital para «alzar la voz» y demostrar a todas las administraciones que León está «cansado y aburrido de promesas incumplidas».

Bajo el lema 'Más soluciones y menos cuentos', los convocantes invitan a recorrer la ciudad desde Gran Vía de San Marcos hasta la plaza de Regla siguiendo el mismo recorrido que en la última marcha. «Que no nos cuenten cuentos. Estamos cansados de que la Junta culpe al Gobierno central y viceversa, de que se olviden de León y que cada vez nos vengan con un cuento nuevo. Y estamos muy cabreados, porque los leoneses merecemos respeto», señalaba en la rueda de prensa donde se ha presentado la primera acción de un otoño caliente en la provincia Enrique Reguero, secretario provincial de UGT.

Los sindicatos piden una participación «transversal» en una manifestación en la que tienen que participar «todos los leoneses para denunciar esta situación de abandono y maltrato». Porque, según apuntaba Reguero, León ha pasado de formar parte de la España Vaciada a hacerlo de «la vacilada».

Asegurando que los leoneses estamos «hartos y jodidos», alerta Reguero de que en los próximos días, semanas y meses «nos visitarán consejeros y ministros prometiendo reactivar proyectos, anunciando nuevas inversiones... no queremos más cuentos, porque la realidad es que León no sale ni en las encuestas ni en la predicción meteorológica, no existimos sin voluntad política».

Acompañado en la mesa por otros siete representantes de los distintos sindicatos, Reguero llamaba a la participación masiva porque «León se merece un respeto y tiene que hacerse oír en las calles, que es de lo poco que nos queda».

Tomaba la palabra a continuación Antonio Nicolás, de USO, quien recordaba que la Región Leonesa sufre «una crisis permanente, una fatiga de materiales» que deja a la provincia leonesa a la cola de todos los indicadores socioeconómicos. En el foco de sus críticas el conjunto de responsables políticos y empresariales que han llevado a León a una situación «de quiebra». «Todos ellos la mataron y ella sola se murió. Si no hay soluciones ya, esta provincia se ahoga», concluía.

En la misma línea se pronunciaba el representante de CGT, Jesús López, que tomaba la palabra para llamar a la «lucha colectiva de toda la sociedad leonesa» señalando «a todas las administraciones públicas, todas, porque son responsables de la falta de gestión de los recursos, del desmantelamiento de los servicios públicos y del bloqueo del diálogo social» así como a las empresas que con sus «malas prácticas incumplen los convenios».

Por su parte Elena Blasco, secretaria provincia de CCOO y que se enfrenta a su primera gran manifestación por el futuro de León tras la polémica salida del sindicato de Xosepe Vega y su entrada a la dirección, ponía el foco en la «inacción» de la administración pública para controlar las inversiones del pasado y que ha llevado a la crisis económica, social, cultural y laboral que padece León.

Aseguraba Blasco que la sociedad leonesa está «cansada de promesas incumplidas, enfadada por la mala praxis empresarial y decepcionada por la irresponsabilidad» y mantenía el discurso que hizo suyo desde su llegada al sindicato, el de exigir la implantación «inmediata y urgente» de un plan de emergencia para la provincia que pase por la inversión pública, con acciones concretas y calendarizadas.

Aunque la administración pública a todos los niveles ha sido la gran señalada en la presentación de la manifestación por los sindicatos, lo cierto es que, como en anteriores ocasiones, se reunirán además de con asociaciones y colegios profesionales, con los partidos políticos para tratar su participación en la marcha del 10 de noviembre con el objetivo de que sea un movimiento «transversal» focalizándose «no tanto en quién convoca sino en el porqué lo hace».

Fue tras la última gran marcha por el futuro de la provincia cuando la Mesa por León, el organismo que nació con la intención y el supuesto compromiso de sacar a la región de su complicada situación, finalmente pereció. Aprovechaba la rueda de prensa Enrique Reguero para volver a pedir explicaciones al Gobierno, a la Junta y a la Diputación de por qué se puso fin a su funcionamiento.

Preguntado por si, en el caso de que las administraciones dieran un sí al plan de emergencia que proponen ahora los sindicatos, vería precedente crear un organismo similar a la Mesa para gestionarlo, Reguero reiteraba que lo primero es una explicación de «qué ha pasado con la Mesa y que se dejen de engaños porque si los leoneses hay algo que no somos es tontos».

Elena Blasco, representante del otro sindicato que formaba parte de aquella Mesa, cree que «retomar algo muerto no es una buena opción». «Habría que hacer un proyecto con una fórmula más eficiente», concluía.

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