Silván inicia el curso político con el empleo como eje y abogando por «más gestión y menos política» en el Ayuntamiento

En el Coto Escolar, como viene siendo tradición, Silván ha hecho un balance de los dos primeros años de mandato marcado por la pluralidad de siglas en la corporación municipal que ha exigido de diálogo para hoy poder hablar de estabilidad en la toma de decisiones.

Dos años en los que se ha ordenado internamente la casa con la elaboración de una RPT y en los que se ha reducido a la deuda municipal en 20 millones, hasta alcanzar los 220, mermando la presión fiscal a los leoneses, tónica que se mantendrá hasta el final del mandato.

Es más, Silván garantizó que en “la medida que podamos rebajar la presión fiscal se llevará a cabo. En ningún caso se incrementará porque, como siempre he dicho, quiero que el leonés tenga el dinero en el bolsillo”.

Diálogo y entendimiento que ha permitido estrechar relaciones con los agentes sociales de la ciudad de León así como implantar vías de colaboración con el Gobierno de España, la Junta y la Diputación que hoy han conseguido que León sea la única ciudad de la Comunidad que aborde el soterramiento del AVE sin que suponga un coste para los leoneses.

A ello se suma, continúa Silván, la reactivación de la obra de Feve y que las del Palacio de Exposiciones estén dando sus últimos coletazos o que por primera vez León cuente con un Plan Estratégico de ciudad dotado con 28 millones de euros. Es el resultado, según remarcó, del trabajo callado y omiso a las críticas.

“Durante estos dos años hemos sembrados de forma callada y soportando las críticas pero siempre sin entrar al trapo porque lo que nos interesaba era trabajar en los despachos de las diferentes administraciones”, remarcó Silván que mostró su agradecimiento al “magnífico equipo” que le rodea.

Y en un León donde el paro se atenúa, aunque levemente, y con un amplio calendario de obras y proyectos en marcha, Silván encara este nuevo curso emplazando a toda la corporación municipal a la unidad para dar alas al futuro de la ciudad.

“La democracia no está reñida con las mayorías. Siempre he dicho que en el Ayuntamiento todos deberíamos hacer menos política y colaborar más con la gestión. No se pueden poner palos en las ruedas y ralentizar nuestra que gestión que, al fin de cuentas, perjudica al ciudadano”.

Porque aunque hoy 5 de septiembre se muestre satisfecho de los logros alcanzados en estos dos años, Silván advierte que trabajará lo que le resta de mandando con el inconformismo que ha marcado estos dos primeros años y sin desvelar, por el momento, si su objetivo es presentarse a la reelección en las elecciones del 2019.