Una segunda vida para Casa Luisón

El mítico restaurante, que abrió sus puertas por primera vez a los leoneses en 1914, comienza su transformación con unas obras en pleno centro de León que han llamado la atención de muchos transeúntes. Un entorno emblemático en el que la fachada del restaurante llevaba años cerrada y sorprendía que nadie quisiera adquirirla para poder abrir un nuevo negocio.

Un proceso que ya se está llevando a cabo y que pronto se conocerá que será lo que dará vida a la ciudad de León en ese marco único desde el que se tiene una de las mejores vistas de la Catedral de León.

El Restaurante Casa Luisón abrió por primera vez en 1914 y su dueño era Luis Flórez Álvarez, natural de Villaobispo. Un lugar muy especial para muchos que por allí disfrutaron de esa atención personalizada a vecinos de la zona y visitantes de la capital. Además de vino y orujo, servía raciones de comida y fue muy popular en la ciudad durante muchos años.

En la década de 1950, dos de los hijos de Luisón continuaron la actividad del restaurante y un tercero abrió uno en Villaobispo con este mismo nombre, restaurante que hoy en día sigue en activo en la localidad del alfoz.

Siguiendo la tradición familiar Rogelio creó su familia junto a Eloina y poco a poco, siguiendo una estela iniciada en 1914, emprendieron su propia aventura. Desde bien pequeño había conocido aquella sana tradición de tomar el chato a los pies de la Catedral de León y quiso replicarlo en Villaobispo de las Regueras. Una pasión por la hostelería que se siguió transmitiendo de generación en generación y que hoy sigue siendo así tras la muerte de Rogelio.

Las obras, que no siempre son agradables, han sido bien recibidas por los vecinos empresarios y hosteleros de la zona. Y así lo reconocía Miguel, responsable de La Pulchra Leonina, quien aseguraba que «es una gran noticia, sea lo que sea dará vida a la zona y eso es lo que necesitamos».

Por el momento, poco se sabe del futuro del que fuera Restaurante Casa Luisón. Una obra de estas características aún tardará en darse a conocer a los leoneses, pero sus nuevos propietarios, que no pertenecen a la familia Luisón, esperan que pronto puedan darse más detalles.