Santi Bécares, el mecánico 'top' de León

Siempre fue un 'manitas' y en su mente los motores siempre sonaban 'redondos' y rendían con toda la potencia que salía de su interior. Y todo mientras él radiografiaba cilindros, pistones, el cigüeñal o las bielas.

Era muy pequeño y ya entonces a Santiago Bécares la mecánica le chiflaba. Una pasión que le llegaba de herencia familiar y que tenía muy dentro: «Siempre tuve claro que quería estudiar mecánica y siempre soñé con tener un taller y poder vivir de la mecánica. Quería ser muy bueno en lo que había y lucho para que siempre sea así», asegura.

Toda esa pasión por el motor, por la mecánica en realidad, es la que le hizo participar en las últimas jornadas en una de las convocatorias más apasionantes del sector: la gran prueba de mecánicos organizada por 'La Comunidad del Taller'.

Una llamada a nivel nacional a la que respondieron más de 650 mecánicos que se sometieron a dos 'cribas'. En la primera la cifra se redujo a medio centenar de profesionales y en la segunda salieron los nueve mejores. Y ahí estaba Santi.

«En la elección final quedamos nueve porque a las pruebas se suma el ganador de la última edición», asegura.

Y la gran final, el Concurso MVP, tuvo como escenario el Circuito del Jarama. Allí, y tras un sorteo aleatorio, los diez participantes formaron cinco parejas de dos mecánicos que se enfrentaron a cuatro retos: avería de coche, chequeo de un vehículo, atención a una reclamación del cliente y una prueba de componentes eléctricos.

«Las pruebas fueron muy intensas pero muy atractivas para los profesionales. En la primera había que detectar una avería en un coche que estaba vinculada a un problema de fusibles. La segunda era valorar y detectar la situación real de un coche que un cliente llevaba para que se le aconsejara o desaconsejara la compra. La tercera fue para mí la más interesante porque era enfrentarse a una reclamación real de un hombre descontento con la reparación y había que analizar no solo la parte mecánica sino trabajar en el plano psicológico. Era una situación límite. En la última era una prueba de componentes eléctricos en un vehículo híbrido que también nos resultó muy interesante», recuerda ahora el titular de Bécares Motor.

Cada actuación era puntuada por los jueces que finalmente decidieron una pareja ganadora enfrentándose finalmente los mecánicos entre sí en una nueva prueba. Para Santi Bécares el premio ya venía dado porque el gran reto era estar en el Jarama y él lo había logrado. «Me quedo con la experiencia vivida. Espero que esto sirva para reivindicar nuestra profesión», asegura.

De regreso a León recuerda que la experiencia evidencia «la alta capacitación de los mecánicos en España». Un sector sometido a permanentes retos formativos: «Estamos en un momento en el que la capacitación es importantísima. Hay que formarse permanentemente y quien no haga ese esfuerzo lo terminará pagando».

Igualmente remarca su empeño personal por continuar divulgando la labor del mecánico, algo que es una constante en sus redes sociales: «Yo hago vídeos en redes para reivindicar nuestro papel como mecánicos. No hago vídeos como negocio o para que la gente venga a mi taller. Si me llama una persona con un problema en su coche y vive a 300 kilómetros yo siempre le comento que busque un mecánico de confianza cerca, que los hay seguro, pero que no le merece la pena hacer ese esfuerzo».

Un esfuerzo por acercar la mecánica a la calle que seguirá presente en su día a día. Y a él, que la mecánica le chifla, le queda una última reflexión: «Volveré a participar en este concurso. La experiencia merece la pena».

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