La ruptura de Vox en León: «Es bochornoso para nuestros votantes»

El detonante fue una comisión y el incremento del precio del parking del Hospital de León. Pero la bomba llevaba activa desde el principio. La marejada de fondo terminó en una tormenta que ha partido en dos al Grupo Municipal de Vox en el Ayuntamiento de León.

El divorcio entre los dos concejales, Blanca Herreros e Ildefonso del Fueyo, se ha entendido como «una traición» por parte la portavoz. «Es un bochorno lo que ha pasado de cara a nuestros votantes». Calificando los hechos como «un jarro de agua fría», la edil reconoce que el desenlace de la relación era algo «que iba a pasar tarde o temprano» a pesar de sus intentos por encauzarlo.

Herreros se ha mostrado contundente para señalar al que es ya su excompañero de filas. «Del Fueyo no llevó bien ni el proceso para que yo encabezara la lista ni que yo estuviera por delante de él», ha reconocido. Una decisión que llegó desde Madrid y que ha ido lastrando este camino en el que ha señalado «la falta de compromiso, implicación y disposición» por parte de Ildefonso.

Sobre la comisión que hizo saltar por los aires al grupo municipal, la portavoz de Vox en el Ayuntamiento de León explica la ruptura de disciplina de voto del que era su compañero de bancada en San Marcelo. «No es que le afeara la indisciplina, tuvimos una discusión muy fuerte y ahí quedó la cosa. Incluso me pidió disculpas».

Blanca Herreros dio conocimiento de los hechos al comité provincial y al órgano intermunicipal y planteó medidas «no por romper el voto, si no por su actitud durante el año». La propuesta fue cambiarles algunas comisiones como «toque de atención para ver si se podía reconducir», explica, apuntando incluso a que su autonomía como concejal «parecía dirigida» por el concejal del Partido Popular José Antonio Cabañeros.

La decisión de Vox León «no le gustó», explica su portavoz. Tras no aceptar la decisión del cambio de comisiones, comunicó que pasaba a no adscrito y, a continuación, pidió la baja del partido. «Si no lo hubiera pedido, se le habría expulsado por un proceso interno», matiza la edil.

Para la ahora única concejal de Vox en el Ayuntamiento de León, la situación le ha provocado «un disgusto terrible, a nivel de imagen y personal» y considera que las decisiones se tienen que tomar de otra manera cuando estás en la primera línea política. «Ahora nos queda seguir trabajando por mejorar la ciudad desde nuestras posibilidades».

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