El regreso de la gripe lleva al Hospital de León al 90% de ocupación a espera del pico de incidencia

Una vez que la obligación del uso de la mascarilla se convirtió en recomendación, los ciudadanos han podido regresar a la normalidad y destaparse la cara. Sin embargo, esta condición de 'libertad' ha llevado al repunte de la epidemia que todos los inviernos azotaba a los leoneses.

El goteo de casos de gripe ha acabado por imponerse a la covid-19 y ya está empezando a apretar la tensión hospitalaria en León. El Caule -Complejo Asistencial Universitario de León- se encuentra al 90 por ciento de ocupación -766 pacientes- sobre las 850 camas iniciales con las que cuenta en planta.

Hasta el momento, la situación no ha encendido las alertas en el hospital ni está previsto -a corto plazo- aumentar el número de unidades y plantas para asumir una nueva oleada de ingresos. Eso sí, se advierte desde los sindicatos de una necesidad de «anticiparse» a la oleada de casos y «planificar» antes de que los niveles de disponibilidad de camas siga aumentando.

Y es que desde la vertiente sanitaria ya se advertía de esta posibilidad. El abandono de la mascarilla iba a conllevar que el siguiente invierno «hubiera un problema que llevaba dos años sin aparecer», como es el caso de la gripe, «y que iba a aparecer a lo bestia». Por ello, aseguran que es «un zasca a todos los ciudadanos» para que no se relajen las medidas.

Desde CSIF, Rubén Martínez recuerda que este tipo de virus respiratorio fluye en las condiciones atmosféricas actuales y en el aumento del contacto entre personas en interiores y con poca distancia, por lo que pide recuperar la consciencia en el uso de la mascarilla.

En los dos años anteriores, la red de vigilancia de la gripe en León detectó «casos mínimos» en los inviernos de 2021 y 2022. Sin embargo, la covid-19 vuelve a dejar paso a la gripe y desde el Hospital de León se ven «abocados al año 2019-2020, el de justo antes de la pandemia, con tasas de gripe muy altas, altísimas en enero, y a esas circunstancias estamos volviendo».

La situación aún no es de alarma, a pesar de alcanzar niveles de ocupación del 90 por ciento en el Caule. No se ha requerido, de momento, habilitar nuevas camas y el hospital «está aguantando» a la espera de tener que reforzar la plantilla y los materiales «porque la epidemia de este año no ha hecho techo y puede seguir creciendo».

La situación es más complicada en el caso de las Urgencias. La época del año ha provocado un crecimiento de los pacientes que acuden a esta vía de entrada al hospital, algo que se pide evitar por parte de los sanitarios. «Si uno tiene síntomas y no le dan cita se va a Urgencias y allí prima el criterio de gravedad. Luego llegan las quejas», advierten a pacientes con sintomatología leve que acuden a este área. «La demora de cuatro o cinco horas va a ser normal. La Urgencia es la costura del hospital y ahí cabe todo, y no debe ser así», explican para evitar que pacientes no graves acudan aquí.

El portavoz de la Junta de Castilla y León, Carlos Javier Fernández Carriedo, ha asegurado este jueves a la conclusión del consejo de gobierno que la sanidad asistencial «no está exenta de problemas».

«Tenemos que estar muy atentos porque aún no ha llegado el pico de la gripe. Hay problemas en hospitales de otras comunidades y quizá aquí por el momento no son tan graves. Tenemos que pensar a largo plazo», ha recordado.

«La valoración del sistema en la comunidad es mejor que a nivel nacional, pero tenemos que mantener un alto nivel de atención» ante la posibilidad de que se presenten complicaciones.