El PP reconoce que el despido de su gerente en León fue improcedente y asume todos los costes

Asumida la decisión la formación popular ha procedido al abono, en base al acuerdo firmado el pasado día 28, de las cantidades adeudadas por el fin de la prestación laboral a su gerente en León, Yolanda Gutiérrez Ponce.

De este modo el partido asume que nunca tuvo base legal alguna para prescindir de su gerente y que el hecho de prescindir de la misma tuvo como único argumento la sospecha de que había sido ella quien había filtrado los documentos del 'escándalo' que rodeó a su diputado nacional José Miguel González.

En realidad el despido nunca tuvo sustento por ese lado y sí en un evidente ánimo de prescindir de sus servicios por diferencias con la nueva secretaría general, que tuvo en Yolanda Gutiérrez un 'filtro' que limitaba muchas de sus impetuosas decisiones.

El diputado y secretario general siempre había evidenciado su rechazo a los controles realizados a nivel interno desde el despacho de la gerente, un enfrentamiento que se multiplicó tras trascender que precisamente José Miguel González presumía de un título de derecho que nunca había tenido en su poder.

José Miguel González nunca cursó los estudios de los que presumía y fue más lejos cuando, de forma voluntaria, entregó un título falso para justificar su titulación universitaria. Pese a la inquina personal hacia la gerente del partido, en realidad ella nunca había participado en filtración alguna.

Ahora el PP asume que el despido fue improcedente y se hace cargo de los costes asociados a tal decisión entendiendo que nada sustentaba sus sospechas sobre la entonces gerente del partido.

Fue el pasado 26 de noviembre cuando Génova decidió cesar a Yolanda Gutiérrez. Entonces no argumentó la decisión, pero tras la misma siempre se dejó ver que obedecía a las supuestas filtraciones por la falsa titulación en Derecho del que fuera secretario general del partido en la provincia y diputado electo, José Miguel González.

La noticia había saltado a la luz días antes cuando leonoticias publicó que el diputado aseguraba ser licenciado en Derecho sin serlo incluyendo en su falsa titulación en el currículum oficial del partido y aportando un título falso de la Universidad Complutense al propio medio cuando fue requerido sobre esta cuestión.

Por estos hechos, González Robles presentó su «dimisión irrevocable» de todos sus cargos y culpó del escándalo al 'aparato local' de su propio partido.

Lo hizo para aliviar la carga de sus falsos estudios porque en realidad la sospecha sobre su comportamiento la había evidenciado él mismo al ofrecer versiones diversas y contradictorias sobre sus estudios en sus redes sociales.