El próximo curso será presencial, con mascarilla, distancia de 1,2 metros y ventilación

Según la ministra, el panorama es más alentador por el «exitoso» proceso de vacunación (que ya llega a los mayores de 12 años) y la experiencia del trabajo que la comunidad educativa hizo ya el curso pasado, en el que la presencialidad estaba garantizada al menos hasta tercero de la Educación Secundaria.

Alegría agradeció el tono de sus interlocutores en una reunión que calificó de «fructífera», que trascurrió en un «tono amable».

La nueva ministra hizo referencia a las medidas aprobadas por su predecesora, Isabel Celaá, junto a Sanidad a principios de verano de cara al nuevo curso. «Estos protocolos son las guías que nos permiten organizar el curso 2021-21 para hacer frente a la pandemia que todavía está entre nosotros», dijo, y contemplan, por ejemplo, la reducción de la distancia interpersonal, que pasa de 1,5 a 1,2 metros.

La ministra llamó, sin embargo, «a la prudencia y a no bajar la guardia», por lo que indicó que en el inicio de curso la mascarilla será obligatoria para los mayores de seis años, a menos que las autoridades sanitarias relajen esa medida si la pandemia evoluciona positivamente.

También confesó que ha pedido a los responsables autonómicos «que consideren la educación prioritaria en el reparto de los fondos Covid«, en referencia a los casi 13.500 millones llegarán a los gobiernos regionales antes de fin de año para atender las problemáticas sociales desatadas por la pandemia.

Alegría también se refirió a otros temas que se abordaron en el encuentro, como el desarrollo de los currículos que plantea la nueva ley, la Lomloe, y la escolarización de los menores extranjeros en Ceuta.

«Son documentos de trabajo y desde el inicio, cuando nos pusimos a realizarlos, ya tendimos las manos a todas las comunidades autónomas para su elaboración. Y es lo que seguimos haciendo en estos momentos, contar con todas, con un sentimiento de absoluta lealtad«, precisó. En este punto, invitó a un «debate sereno y sincero», con «sosiego, prudencia y responsabilidad».

Alegría añadió que se ha prorrogado el plazo para que las autonomías puedan hacer sus aportaciones a los borradores de los futuros currículos educativos hasta «la primera semana de septiembre« y agregó que su deseo es «ampliar» el consenso que en su opinión se alcanzó en la aprobación de la Lomloe. «Uno de los caminos es el desarrollo de los distintos reales decretos», expuso.

La responsable de las políticas educativas del Gobierno también se refirió a la situación de los menores extranjeros en Ceuta, cuya devolución a Marruecos ha paralizado la Justicia porque entiende que vulnera el interés superior del menor.

La ministra se comprometió a que los menores que se encuentren en la ciudad autónoma en el momento en que empiece el curso serán atendidos educativamente. «Llevamos semanas trabajando en este asunto de una manera muy urgente. Porque el inicio del curso está a la vuelta de la esquina», dijo.

El Ministerio de Educación y Formación Profesional tiene competencia directa en las ciudades autónomas. Según ha podido saber Servimedia de fuentes educativas, el Alegría estudia un plan para escolarizar a, al menos, 900 menores extranjeros que se encuentran en Ceuta y Melilla, entre los que se incluirían a unos 300 de los que llegaron a territorio español el pasado mayo, durante la crisis migratoria con Marruecos. «Estamos trabajando siempre en bien del interés del menor», concluyó.