45 propietarios del edificio Severo Ochoa demandan a la Junta de la comunidad por «impulsar gastos millonarios en la reparación de las fachadas»

Casi medio centenar de propietarios del edificio Severo Ochoa en León capital han demandado al presidente de la comunidad y del Colegio de Médicos de Castilla y León, José Luis Díaz Villarig, por «impulsar gastos millonarios en la reparación de sus fachadas» que, según afirman, alcanzan los 4,4 millones de euros.

En un comunicado que ha remitido a los medios la Asociación por una Gestión Transparente del Edificio severo Ochoa, acusan a Villarig de «imponer» el coste de la reparación de las fachadas del edificio que ocupa una manzana entera y que arrastra deficiencias desde hace 16 años.

Acusan a Villarig de «huir de todo control, secuestrando la documentación de las obras para que los vecinos no puedan fiscalizarla y apartando a los peritos que designó el juzgado para evitar que las controlen, consiguiendo imponer así unas obras multimillonarias».

Los vecinos, muchos de los cuales afirman «sentirse amenazados», han denunciado que la negativa de Díaz Villarig al control de las obras les 'obliga' a deducir que «tiene interés personal en que las obras se ejecuten por encima de lo necesario, en contra de los intereses de los vecinos».

Por su parte Villarig ha asegurado a leonoticias que «todo es rotundamente falso». Afirma que en ningún momento ha tomado ninguna determinación a título personal, sino que «todas las decisiones parten de la Junta de propietarios formada por 14 representantes ya que hablamos de un edificio con más de 180 propietarios, más de 30 locales y plazas de garaje».

Además, afirma que toda la documentación «se ha entregado, desde el proyecto, los presupuestos y todo». El también presidente del Colegio de Médicos de Castilla y León asegura que es presidente desde hace más de 20 años porque «así lo han decidido los vecinos» y anuncia que, «visto el cariz que las acusaciones están tomando hacia mi persona, tomaré las medidas que tenga que tomar para defenderme donde hay que hacerlo».

El inmueble ha arrastrado desde su inauguración diversas deficiencias en sus fachadas exterior e interior que desde hace quince años han obligado a abordar reparaciones que han acabado desencadenando un enfrentamiento de un grupo de vecinos con el presidente. Un enfrentamiento que ahora se librará en los juzgados según han afirmado ambas partes implicadas.