De Pedro, cabeza de la Púnica, exculpa a Marcos Martínez en todos los términos

En su testifical en sala también ha remarcado que nunca pensó en gestionar las estaciones de esquí: «Yo lo único que sé de esquí es que soy esquiador, nada más. Con mis empresas yo no podía gestionar eso».

Alejandro de Pedro ha asegurado que conoció a Isabel Carrasco a través de Estudio Comunicación, en Fitur, cuando el responsable de esta empresa le indicó que la presidenta estaba muy enfadada porque las noticias sobre Turismo no salían en el buscador Google. «Entonces el responsable de Estudio Comunicación me dijo: Alejandro, te necesito», indicó. Fue ahí donde comenzó la relación Madiva-León.

También ha advertido que su relación con la Diputación se materializó a través de José Luis Arranz, entonces jefe de prensa de Isabel Carrasco. Arranz también indicó a Alejandro de Pedro la necesidad de «pantallazos» para el abono de facturas antes de advertir: «Seguimos a rajatabla las instrucciones que nos daba la Diputación (para el pago de las facturas)».

En su relato ha remarcado que sus periódicos -tratados como zombies- solo publicaba noticias de los gabinetes de prensa «porque el cliente paga».

A preguntas de su letrado ha reconocido que su empresa trabajaba la reputación de la Diputación de León: «Si a mí esa señora me dice 'Álex límpiame' yo no haría esto. Esta señora tenía 13 cargos y ocho gabinetes de comunicación, pero eso no lo hacíamos».

Además ha indicado que «Marcos Martínez jamás tuvo el más mínimo interés por el tema de los informes. Bastante saraó tenía él con todo lo que se le vino encima» por lo que ellos simplemente se limitaron a dar continuidad al contrato habilitado en la etapa de Carrasco: «De manera automática se pasó a seguir trabajando con el nuevo presidente».

Además ha remarcado que nunca prestó «asesoramiento político a Marcos Martínez. Pude dar mi opinión, pero desde luego no soy asesor político». Todo ello antes de terminar su testifical entre lágrimas.