El peaje del Huerna recaudó 41,7 millones el pasado año, su mejor resultado desde 2009

El balance de Aucalsa -según los datos a los que ha tenido acceso El Comercio-, la concesionaria que explota el paso, indica que el pasado curso recaudó 41,7 millones, un 10,2% más que en 2021. Los conductores que entran o salen de Asturias aportaron así 114.246 euros al día a la caja de la empresa. El paso adelante no solo cierra la crisis de usuarios motivada por la covid, sino que eleva a la autopista a una de sus mejores cotas. Hay que remontarse a 2009 para encontrar un mayor volumen de ingresos, con apenas 200.000 euros más.

La cifra figura en los resultados que Itínere Infraestructuras, la sociedad dominante, presentará en su junta ordinaria de accionistas del próximo día 17. Según la documentación, el resultado que se atribuye es de un beneficio de 3,6 millones, lo que sugiere unas ganancias propias del 8,6% sobre la cifra de negocio. Son beneficios similares al curso anterior, hecho notable si se tiene en cuenta que en 2022 se terminó la bonificación del 95% al impuesto del IBI, lo que ocasionó un desembolso extra de 2,9 millones.

Varios son los factores que explican la bonanza del ejercicio. El fundamental es un incremento del tráfico, con 9.191 usuarios al día, lo que supone un 10,28% más que en 2021. El comportamiento no es exclusivo de la vía de pago. En el mismo periodo el puerto de Pajares (N-630) cosechó 3.263 circulaciones diarias, una mejoría del 9,94%, similar a la de la autopista. Ese comportamiento simétrico explica que la AP-66 siga siendo la opción elegida por el 74% de los conductores para viajar entre Asturias y León.

Crece el tráfico, pero además Aucalsa aplicó a sus tarifas de 2022 una subida del 1,97%. Con la fórmula habitual que regula los precios de las autopistas la subida de este año tenía que haber sido del 8,28%, si bien el Consejo de Ministros la limitó al 4% compensando a las empresas tirando del Presupuesto General del Estado.

Según indica la compañía a sus accionistas, sigue en tramitación el recurso contencioso-administrativo interpuesto en los primeros meses de 2022, solicitando una compensación por el perjuicio que ocasionó a la compañía la pandemia. Según su posición, la sociedad se vio obligada a mantener su actividad «por tratarse de infraestructuras críticas del transporte», a pesar de que el confinamiento y las medidas de restricción mermaron la movilidad y sus ingresos.

Itínere recuerda que tiene por delante 28 años de explotación del Huerna, lo que implica que es la autopista a la que más tiempo le queda de las cuatro que gestiona. Su documentación hace referencia al proceso abierto por la Comisión Europea para analizar la legalidad de la prórroga de Audasa pero nada dice de la denuncia similar relativa a Aucalsa.