Paradores defiende su proyecto, recibirá la obra el día 9 y espera inversión para la fase II en 2021

Desde Paradores se ha puntualizado que las imágenes que se han hecho públicas corresponden en su mayor parte con el nuevo claustro, mientras que en la remodelación de la parte más noble del edificio se ha restaurado y respetado el perfil histórico del edificio.

Unas imágenes de una remodelación que se inició hace casi tres años y que han generado cierta polémica llegando a compararla con un «tanatorio».

Fuentes de Paradores han recordado que la parte noble del antiguo parador ha sido ejecutada acorde al proyecto que en su momento definió el anterior equipo nombrado por el Gobierno del PP, asumiendo el actual equipo dicho proyecto desde julio de 2018.

Mientras que el nuevo equipo nombrado por el Gobierno socialista sí se ha encargado del proyecto de decoración y el artístico, que es el que aún falta por desarrollar.

El de San Marcos, emblema de Paradores Nacionales de Turismo y del sector hotelero leonés, se encuentra cerrado desde diciembre de 2017 para someterse a una reforma integral.

El parador se dividía en dos espacios diferenciados: el histórico y el edificio más moderno que databa de los años 70.

La anterior dirección de Paradores decidió que la obra se dividiría en dos fases en la primera de las cuales se acometería la reforma del edificio histórico, mientras que en la segunda, aún sin fecha definida, se reservaría para la construcción de un nuevo edificio para lo que se derribó el edificio moderno existente adjunto al inmueble histórico.

El proyecto elegido para la ejecución de la obra fue el presentado por la arquitecta Mina Bringas y la constructora adjudicataria de la obra fue la empresa FCC. Y busca devolver al edificio la volumetría que tenía originalmente en el siglo XVIII y que se anuló en la reforma realizada en los años 60.

Para ello se ha construido un atrio interior cerrado, pero con entrada de luz natural.

En ese nuevo espacio estará ubicada la cafetería y, sobre él, colgado a gran altura, se puede contemplar ya en el techo un mural de Lucio Muñoz.

La reforma también ha supuesto la reubicación de algunas servicios ya que la recepción se ha trasladado a la antigua cafetería y viceversa, lo que puede ser la causa de la confusión sobre las fotografías hechas públicas ya que se ha mostrado la zona de nueva construcción del claustro, ha explicado Paradores.

Una polémica que no abandona el proyecto, primero por los retrasos en la remodelación, luego por la falta de presupuesto y plazos para asumir la fase II y ahora con el resultado final.

En estos momentos, Paradores está a la espera de la entrega de la obra por parte FCC, «a falta de los últimos flecos», previsiblemente el próximo 9 de octubre.

Tras la entrega de la obra, Paradores procederá a realizar la limpieza, decoración y adecuación de las instalaciones con la previsión de abrir al público el próximo puente festivo de diciembre tras tres años desde su cierre.

Con esta apertura restaría la segunda fase de la remodelación para construir el nuevo edificio que sustituya al derribado.

A este respecto, Paradores ha apuntado que cuando el actual equipo tomó posesión no existía proyecto de ejecución ni provisión económica alguna -ni en los PGE ni en los presupuestos de Paradores- para la realización de la segunda.

La actual dirección de Paradores ha consignado partidas para la redacción del proyecto de ejecución de la fase II en el año 2020 y maneja distintas previsiones de inversión a partir de 2021 en función del proyecto que finalmente se apruebe.