El orgullo de la educación leonesa brilla en Emiratos Árabes

Formó parte del equipo español, compuesto por otros tres jóvenes que consiguieron el pasaporte a la final internacional tras ganar en marzo la fase nacional que se disputó en Barcelona. Hugo, tras dos años preparándose para la cita, brilló en una competición en la que representantes de más de 80 países lucharon por hacer un buen papel en las pruebas teóricas y prácticas.

El viaje arrancó semanas antes con unas jornadas de preparación en Mallorca. Tras viajar a Emiratos Árabes, la organización compaginó los exámenes con visitas turísticas a Abu Dabi y Dubai. «Lo peor era el calor. Terrible», recuerda Hugo, todavía sudando al pensar en los 36 grados de mínima y los 49 de máxima que llegaron a marcar los termómetros.

Unas condiciones que no impidieron al leonés hacer un buen papel en las pruebas logrando 88 puntos, solo a dos de una mención de honor y a doce de una medalla. Sus compañeros de equipo sí alcanzaron estas puntuaciones, pero no le queda mal sabor de boca.

«Los mejor ha sido la experiencia, una pesada», define. Conocer el país y, sobre todo, a sus más de 300 compañeros de aventura llegados de todo el mundo son los grandes souvenirs que Hugo trae a León. «Hablamos de los sistemas educativos de cada país y compartimos cómo nos habíamos preparado para esto cada uno, ha sido muy enriquecedor».

Ya más tranquilo tras su vuelta a casa, donde fue recibido como todo un héroe por sus amigos del instituto, Hugo se prepara para mantener una buena charla con Josefa, la profesora que hizo que este sueño fuera posible. «Ella me animó siempre a participar y me vino también a buscar a la estación a mi vuelta. Está orgullosa como la que más y no veo el momento de explicarle cómo fueron todas las pruebas y las preguntas», se sonríe Hugo.

El joven leonés cierra este capítulo pero lo hace para comenzar a escribir otro que le seguirá llevando por el camino de la ciencia y la investigación. Sus excelentes resutados en la prueba de la EBAU -con un 13,45 de media- le han valido para conseguir una plaza en el grado de Bioquímica de la Universidad de Granada, donde podrán rumbo en septiembre. Antes pasará por Zaragoza para asistir a un congreso de la sociedad española de bioquímica por haber ganado la fase nacional de la Olimpiada.