Secciones
Servicios
Destacamos
León quiere ser un referente en supercomputación. O al menos así lo ha señalado el consejero de Fomento, Juan Carlos Suárez Quiñones quien ha recordado la inversión de 20 millones de euros para las instalaciones del nuevo Centro de Procesamiento de Datos, CPD, del supercomputados ... Calénduda en el Centro de Supercomputación de Castilla y León situado en el campus universitario leonés.
La Consejería ha anunciado así una inversión de cerca de 20 millones de euros para el proyecto de mejora del supercomputador que tendrá un edificio propio y dará respuesta a la creciente demanda de servicios de supercomputación.
«Supone una inversión de 20 millones de euros para un nuevo edificio que estará enfrente, donde se va a alzar un inmueble de 2000 metros cuadrados. Ya está adjudicado por tres millones de euros para que en el año 2024 esté listo», ha destacado Suárez-Quiñones que ha señalado que el nuevo CPD incorpora mejoras técnicas y nuevos sistemas de refrigerado para optimizar los costes de mantenimiento y reducir el impacto ambiental. El nuevo centro se ubica en una parcela situada de la calle Profesor Gaspar Morocho, junto al Centro Integrado de Formación Profesional, y su construcción ya ha sido adjudicada a la empresa leonesa Incosa, por lo que se está a la espera de que en unos tres o cuatro meses tengan el proyecto de obra para poder licitarse aproximadamente en junio de manera inmediata e iniciar las obras en el mes de septiembre con un plazo de ejecución de 18 meses.
Entre las mejoras que se llevarán a cabo gracias a estos fondos de recuperación, Juan Carlos Suárez-Quiñones destacó la ampliación de la capacidad de Caléndula, que pasará de 0,5 petaflops de potencia de cálculo a diez, así como el almacenamiento de datos, de un petavuytes a 20, y la memoria RAM para la ejecución de servidores virtuales, de 16 terabytes a 128, lo que «se traduce en mayores necesidades de espacio para albergar nuevos equipos e infraestructuras».
La razón de esta ampliación es que los componentes adquiridos para el Centro de Supercomputación, SCAYLE necesitan mayor espacio. Por ello se ha habilitado una sala adicional de 90 metros cuadrados en el mismo inmueble.
Dicha instalación cubrirá las necesidades hasta que este listo el nuevo edificio que albergará la Fundación Centro de Supercomputación de Castilla y León, con un coste de 450.000 euros.
«No sólo se prestan servicios a Castilla y León, también a España. Además desde aquí se gestiona la red de ciencia y tecnología que une la redes de universidades de Castilla y León, centros educativos y centros de investigación de Castilla y León», ha advertido Suárez-Quiñones.
Noticia Relacionada
Rubén Fariñas
Por otra parte, la consejería persigue que León sea una referencia en el cálculo y comunicaciones cuánticas. Por esta razón, ayer se celebró una jornada para presentar las actividades cuánticas en la comunidad. «Aquí habrá uno de los simuladores cuánticos, por lo que desarrollaremos un proyecto de comunicación cuántica en la que solo estarán presentes cinco comunidades»,concluyó Suárez Quiñones.
En este evento se presentaron las actividades a realizar en Castillay León relacionadas con el proyecto Quantum-SPAIN de computación cuántica aplicada a la inteligencia artificial y, por otra parte, las actividades relacionadas con las comunicaciones cuánticas.
La Junta de Castilla y León ha tomado medidas específicas, como el cambio de contraseñas, para cubrirse ante un posible ciberataque a sus infraestructuras críticas en el marco del conflicto europeo actual. Así lo informó el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, quien explicó que se están siguiendo las recomendaciones del Centro Criptológico Nacional. «No es que estemos esperando que se produzca, sino que estamos preparándonos para por si acaso se produce», matizó.
En este sentido, el director general de la Fundación de Supercomputación de Castilla y León, Vicente Matellán, puso de relieve que «la ciberguerra no ha empezado ahora», sino que «se está en ella desde hace años». Una cuestión que sabe de primera mano el Instituto Nacional de Ciberseguridad, «que se dedica a ello directamente».
Las infraestructuras de Scayle detectan «continuamente» ataques ordinarios que hasta ahora no han sido efectivos, pero que dejan ver que el mundo cibernético es «muy peligroso». Sin embargo, no se han detectado «mayores ataques de los habituales», de manera que «lo que sucedía antes sucede ahora en el mismo orden de magnitud», aunque el centro de supercomputación «sí que ha tomado ciertas medidas de precaución» ante «la preocupación» existente.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.