Secciones
Servicios
Destacamos
Un año y medio después de que formalmente se constituyera la conocida como 'Mesa por León' los resultados de la misma cabrían en un folio en blanco. «No ha servido para nada», se ha remarcado desde algunas formaciones políticas. «En este tiempo las administraciones ... han evidenciado su falta de compromiso con León«, se ha advertido desde el sector empresarial.
Con muy poco que ofrecer a la sociedad leonesa, apenas de un puñado de buenas intenciones, la Mesa tendrá en el próximo mes de septiembre un momento clave. Será entonces cuando la coordinadora de la misma, Humildad Rodríguez, inste a las partes a finalizar el recorrido iniciado en el 2020 o en su defecto a apostar de una forma real y realista por este órgano y por el futuro de la provincia.
La mesa de León nació de una inquietud sindical que apuntaba a una realidad incontestable: la provincia se muere por falta de actividad económica, pero también de compromiso con la misma y de un deseo real y efectivo de apostar por su recuperación.
Noticia Relacionada
Cuatro reuniones de nulo resultado y una buena dosis de promesas nunca materializadas han llevado a una realidad que solo invita al pesimismo: al frente de la Mesa por León se ha quedado la catedrática Humildad Rodríguez a quien desde el propio órgano se comprometió un equipo técnico de apoyo que permitiera el desarrollo de planes estratégicos.
El propio presidente de la Diputación, Eduardo Morán, llegó a asegurar a la conclusión del cuarto encuentro de la Mesa que si se precisara se multiplicarían efectivos en ese equipo de apoyo a la coordinadora para «recuperar el tiempo perdido«.
Morán llegó a insistir en que el órgano de gestión de la Mesa, el motor de la misma, empezaría a funcionar de manera autónoma con «un grupo de funcionarios de la Diputación», algo que no ha sucedido.
Fueron palabras que nunca se convirtieron en realidad y que han provocado en Humildad Rodríguez una sensación de desamparo que con certeza se evidenciará en las próximas semanas.
Apenas este mismo jueves la Junta aportó una cantidad de 80.000 euros para elaborar un Plan Estratégico, la mitad de lo necesario para ese plan (el resto debería aportarlo el Gobierno) en una muestra más de la dilación en todo lo que rodea a esta Mesa.
A fecha de hoy, en pleno verano, la situación no ofrece muchas dudas. O se produce un giro en el seno de la Mesa por León, o realmente demuestra que sirve para algo, o desde su propio seno se planteará la disolución por ineficaz, inoperante y nula para los intereses de la provincia.
El 'plan de futuro' que debería elaborar la propia mesa comprendería un periodo de diez años y tendría, entre otros objetivos, atraer y captar intereses económicos y empresariales en beneficio de una provincia castigada por la pérdida de actividad económica y por un galopante proceso de despoblación.
Ambiciosos deseos en un largo camino en el que por el momento no se ha dado ningún paso al frente.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Carnero a Puente: «Antes atascaba Valladolid y ahora retrasa trenes y pierde vuelos»
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.