El lobby del Noroeste logra que Bruselas abra la puerta a las conexiones ferroviarias del corredor Atlántico

Esa asimetría lleva tiempo alimentando la protesta. Comenzaron hace dos años los técnicos ligados a la Plataforma Tecnológica de Túneles de Pajares y en junio los empresarios de Asturias, León, Cantabria y Galicia formaron una plataforma o 'lobby'. En octubre fueron los gobiernos regionales de Asturias, Galicia y Castilla y León los que recogieron el testigo con una declaración institucional que exigía a Bruselas «reequilibrar» su mapa.

El Ministerio de Fomento ha acogido de buen grado los movimientos al entender que «vienen a fortalecer» su posición «frente a la Comisión Europea». Así lo expresó en un comunicado el 9 de octubre, dejando ver por primera vez las gestiones que estaba realizando ante Bruselas. Cabe recordar que en los últimos meses su titular, Íñigo de la Serna, mantuvo reuniones tanto con la propia Comisión como con su homóloga francesa para ir trenzando alianzas.

El pasado 18 de octubre se reunió el comité que gestiona Conectar Europa (CEF), el programa financiero que agrupa estas subvenciones. En la cita, y tras la insistencia del ministerio español y también de otros países, se fijó un calendario para modificar el mapa. Fomento dispone ahora hasta final de año para remitir su propuesta de revisión de los itinerarios. Una vez recibidas las sugerencias de los países, la Comisión Europea las analizará y fijará su planteamiento en junio. «A continuación será discutido por el Consejo y el Europarlamento», explican fuentes ministeriales. Está previsto que la tramitación se pueda prolongar hasta el año 2020.

En su comunicado del 9 de octubre, Fomento anticipó cuál sería su próximo paso: «Se trabajará para incluir los itinerarios procedentes del noroeste español y sus puertos en el corredor Atlántico desde el mismo momento en que la Comisión Europea inicie los trabajos para la elaboración del nuevo reglamento» que rige Conectar Europa.

Las normas del mecanismo financiero están fijadas por el Reglamento 1316/2013. Su intención era superar una fase anterior, en la que las subvenciones a las obras públicas se daban de forma dispersa y poco coordinada. En su lugar proponía concentrar los recursos en materializar una red de transporte de interés continental. Su anexo 1 detalla los distintos segmentos que forman los nueve corredores. Después, reconocía la existencia de «otros tramos de la red básica».

Es ahí donde quedaron los ejes ferroviarios Gijón-Palencia y La Coruña-Vigo-Palencia. Esa posición subalterna, fuera de los corredores, ha impedido que las obras que afectaban al noroeste pudieran acceder a las principales líneas de ayuda. Ahora, estar incluido en ese listado secundario de la red básica propicia que se cumplan las condiciones para ser adherido al corredor Atlántico, según fuentes ministeriales.

Los portavoces de la Comisión Europea recalcaron que por ahora «no se han adoptado decisiones para cambiar la composición de los corredores de la red principal». En realidad Gijón-Palencia no requiere un cambio de esa red, pues ya forma parte de la misma, solo que al margen de un eje del que aspira a formar parte para tener más opciones de financiación. En su respuesta Bruselas apuntaba a 2022 como inicio del procedimiento de revisión, algo en realidad fijado en el Reglamento 1315/2013, que regula aspectos más amplios de esta política de infraestructuras.