Tras la última reunión de negociación del Convenio Colectivo, desde CGT propusieron a todos los sindicatos presentes en la mesa de negociación realizar movilizaciones.
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Para que estas fueran realmente conjuntas y con unos objetivos comunes, desde CGT «habíamos planteado una serie de reivindicaciones mínimas, que ... coinciden con aquellos aspectos más sangrantes y urgentes que venimos sufriendo», remarcan en un comunicado.
Después de haber perdido un 6,5% de poder adquisitivo el año pasado y de haber perdido más de un 15% sólo durante la vigencia de los últimos convenios, después de que el salario mínimo interprofesional (SMI) haya superado a dos categorías del convenio y le pise los talones a especialistas y gestores.
Ante toda esta situación, «la patronal ofrece un 0% para los años 2020 y 2021 y que para 2022 no llegue la subida ni a la mitad de la inflación que sufrimos en estos momentos», critican desde CGT.
Ante esto, aseguran en un comunicado que «la reivindicación que le planteamos al resto de sindicatos fue no firmar nada que suponga una pérdida de poder adquisitivo».
La idea de CGT es fmentar que se hagan más contratos indefinidos. Las anteriores reformas laborales que ya han superado muchos convenios colectivos, han propiciado que en la mayoría de las empresas el porcentaje de indefinidos sea más de un 70% de las plantillas. «Aquí el problema es el abuso de contratos de ETT y el uso que la patronal quiere darle a los contratos fijos discontinuos y por circunstancias de la producción», lamentan desde el sindicato.
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En este caso, la propuesta a los demás sindicatos era que «el convenio de contact centre no volviera a ser el ejemplo más evidente de la precariedad laboral del país».
«La patronal pretende que no aumenten a proporción del coste de la vida. No contentos con ello, las empresas pretenden que sea el convenio más largo de cuantos se hayan firmado», lamentan.
Ante la propuesta de convocatoria de huelga de CGT a otros sindicatos «lamentablemente nos hemos encontrado con una negativa para unificar fuerzas. CCOO y UGT entienden que no es el momento de movilizarse. En el caso de ELA y LAB sólo contemplan realizar movilizaciones si el convenio afectase exclusivamente a los trabajadores de Euskadi, y por último, CIG aclarará su postura a partir del 18 de noviembre, después de una reunión de carácter interno».
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Siguiendo la petición de los trabajadores, desde CGT han intentado una unión «pero no ha sido posible». A pesar de ello, desde el sindicato seguirán luchando y llaman a la huelga al sector el próximo 28 de noviembre.
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