El leonesismo se unirá ante «el ataque en casa» y contraprogramará a Villalar

«Sería lanzarse a los pies de los caballos», sentencia el secretario general de Unión del Pueblo Leonés, Luis Mariano Santos, tras conocer el rechazo de los artistas y el sector hostelero. El líder leonesista considera que «solo a alguien sentado en Valladolid» se le hubiera ocurrido esta «brillante idea» que ni los cargos del PP en la provincia hubieran arropado. «Nadie quiere esta fiesta, ni los propios hosteleros ni los del PP».

En UPL se ven estos actos como «una falta de respeto» y algo innecesario que no se ha hecho en los 40 años anteriores. «Esto responde más a una ocurrencia. Supone una provocación y es soliviantar al leonesismo». De hecho, Santos cree que se debe más a las discusiones internas del gobierno PP-Vox -tras rechazar el partido de Abascal en 2023 que fuera festivo el día de Villalar- y una forma ahora de demostrar «que son los más castellanos y que harán de Villalar algo grandioso en lo que pretenden que juguemos todos».

El procurador leonesista asegura que el 23 de abril serán «consecuentes con lo que defendemos» y habrá una respuesta y un enfrentamiento ante la fiesta organizada por la Junta en León. «Nos entristece porque los esfuerzos deben ir en otro sentido, pero el día 23 nos tendrán enfrente». Además, considera que será «un buen momento» para testar a aquella gente descontenta con la comunidad y demostrar «que estamos en contra de Villalar y de lo que significa esta comunidad y su imposición a la sociedad leonesa».

Por ello, el movimiento saldrá unido tal y como se acordó en una reunión este mismo lunes entre UPL y Conceyu 'País Lliones', como cabeza visible de Xuntanza Llionesista -que engloba a más de 20 asociaciones-. «Iremos todos juntos en todas las decisiones que se tomen» e incluso desde el partido político se planteará alguna actividad y protesta para tener «una respuesta conjunta».

El presidente de Conceyu, Carlos González, «agradece» a la Junta de Castilla y León que se vaya a poner en su cara «lo que no existe aquí» y confía en que la democracia «llegue a León».

La iniciativa que pretendían desarrollar desde el colectivo para este 23 de abril pasaba por Madrid, pero tras la decisión del gobierno de Alfonso Fernández Mañueco de repartir por las provincias la celebración de Villalar: «Ya que vienen a casa a atacar, hay que estar y defender el territorio».

El leonesismo realizará su tercer 'Caminu la Llibertá' que llegará a la plaza de San Marcos, donde está prevista la fiesta autonómica. A la hora del izado de la bandera de Castilla y León -según recoge el programa- se realizará una sonora pitada. Y la «sorpresa» llegará rememorando la quema de una torre, igual que ocurrió hace 28 años, como muestra de repulsa «a la osadía fascista de inculcar su fiesta-derrota en León».

Carlos González pone en valor a los hosteleros y grupos musicales que «huyen de la quema» y han rechazado sumarse a los fastos autonómicos. «Es una osadía gastarse 100.000 euros entre León y Ponferrada para hacer una identidad que no existe», por lo que agradecen que la cultura y otros negocios se «desenganchen» de ello. «Esto es implicarse con la sociedad, que no está tan aborregada como pensamos. La gente es consciente de lo que son y de lo que no quieren ser», sentencia.

Por todo ello, invitan a toda la sociedad y a las diferentes asociaciones «agraviadas» por esta comunidad a ir «a por todas» en una reivindicación abierta para demostrar dónde quieren estar: «En una comunidad constitucionalmente legal».